Encaje sublime

Estudio de R. Reti. Tidskrift KNSB, 1922.

Esta deliciosa danza de precisión de Richard Reti despeja cualquier duda sobre la faceta artística del ajedrez. Es asombroso que todas las piezas se ensamblen con exactitud bajo la música de la lógica por eliminación. Lo primero que se ve es la escapatoria por h4 que tiene el rey negro tras el jaque en g4. Y ahí surge la primera idea de gran belleza: 1 g3! Amenaza Th4+, para que el peón de g5 tapone la salida de su rey, y g4 mate. Pero las negras tienen una defensa, basada en el control de g4 por Rayos X: 1... Tg8. La torre blanca daría mate en h1, así que lo mejor es llevarla a través de b1, para impedir la coronación del peón de d3: 2 Tb4!, g4! De nuevo parece que las negras han encontrado una buena defensa: el jaque en g5 romperá el trenzado blanco. Pero el chaparrón de belleza no ha hecho más que empezar: 3 Tb1, Tg5+ 4 Rxf6, Tg6+ 5 Rf7, d2. Triste necesidad: los movimientos de torre o de rey hubieran permitido el mate en b5. Las negras no tienen más remedio que estrellar su mejor peón contra las rocas, mientras las blancas utilizan el tímido infante de a2 con efectos decisivos: 6 a4!, d1=D 7 T - d1, Tf6+! La fiesta no ha terminado: si se captura la torre es tablas por ahogado: 8 Rg7, Tf5! (pero no 8... Tg6+ 9 Rh7, y las negras se han quedado sin recursos) 9 Tb1! (amenaza Tb5, cambiar torres y coronar el peón de a4) 9... Rg5! (da cuerda al peón de h6) 10 Tb6!! (las blancas no ganan con 10 Tb5 por 10... h5 11 T - f5+, R - f5 12 a5, h4) 10... Te5 11 Tb5! (gana un tiempo esencial porque la torre negra ahora no está protegida) 11... Rf5 12 T - e5+, R - e5 13 R -

h6, y las blancas ganan. Correspondencia: ajedrez@elpais.es