El Barça regala una goleada a Laporta en el inicio de su segundo
El Barça es una máquina que, a medio gas, funcionó de perlas en la noche del Trofeo Gamper. Hace tiempo que los azulgrana no tienen rival en la fiesta del club. Hace dos años cayó el Milan; hace uno, la Juve ganó por penaltis, pero explotó Messi y dejó a Capello con la boca abierta, y ayer le tocó el turno al Bayern, que se llevó cuatro goles.
Felix Magath dejó de entrada a medio equipo titular en el banquillo y dio alas a la voracidad azulgrana. Hubo goles de todos los colores a modo de regalo a Joan Laporta en el inicio de su segunda etapa presidencial. Uno, de falta de Ronaldinho, imparable, precioso; y dos más de Eto'o, elegido el mejor de la contienda después de reivindicarse tras su espantada en el descanso de la Supercopa: pilló un rechace de Kahn después de un disparo del Gaucho y luego aprovechó un error de Hummels, un canterano de 17 años, para batir al veterano portero alemán.
BARCELONA 4 BAYERN MÚNICH 0
Barcelona: Valdés; Zambrotta, Márquez, Oleguer, Sylvinho; Motta, Xavi, Deco; Messi, Eto'o y Ronaldinho en la primera parte y Jorquera; Belletti, Edmilson, Thuram, Gio; Van Bommel, Iniesta, Gudjohnsen; Giuly, Saviola y Ezquerro en la segunda.
Bayern: Kahn; Sagnol, Hummels, Van Buyten, Salihamidzic (Lahm. m. 65); Karimi (Schweinsteiger, m. 70), Ottl, Demichelis, Dos Santos; Podolsky y Pizarro.
Goles: 1-0. M. 30. Ronaldinho, de falta directa. 2-0. M. 32. Eto'o aprovecha un rechace de Kahn a tiro de Ronaldinho. 3-0. M. 37. Eto'o marca tras hacerle un sombrero a Kahn. 4-0. M. 51. Saviola remata una asistencia de Giuly.
Árbitro: Muñiz Fernández. Mostró la cartulina amarilla a Karimi.
76.644 espectadores en el Camp Nou.
Fue una noche tan redonda que hasta Saviola, que espera destino, marcó el cuarto gol a pase de Giuly después de más de dos años de no golear como azulgrana.
La eficacia del Barça dejó feliz a la afición, que saludó el partido haciendo la ola y que ya se lo había pasado pipa en la fiesta previa al encuentro.
Al Barça, con el teórico equipo titular, en el que estaba Zambrotta y faltaba Puyol -no se sabe si por lesión-, le bastó jugar al tran-trán para golear. Más rodado que el equipo azulgrana -ya se ha disputado la segunda jornada de la Bundesliga-, el Bayern pareció no achicarse en el arranque, intentando disputarle el balón al Barça y propulsando contragolpes como el que acabó con Podolski volando por los aires después de chocar con Valdés en una jugada que el árbitro pasó por alto. Pero sólo aguantó un cuarto de hora y ahí se acabó. Sin realizar un fútbol espectacular, muy diferente al de la primera media hora ante el Espanyol, el Barça le acabó arrasando.
El técnico del campeón alemán dijo que pretendía poner a prueba las posibilidades de su equipo en la Champions, pero quizá fue un brindis al sol porque reservó a medio equipo y, además, tenía lesionados a Lucio y Heargraves. Rijkaard, por contra, cambió al equipo entero en el descanso. Ya se había visto a Ronaldinho, Eto'o y Messi. Y a la fiesta se unió entonces Saviola con un gol.
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