Plaga de asaltos en Canals

"No levantamos cabeza", exclamaba ayer el concejal de seguridad de Canals y alcalde en funciones, Pascual Durà, tras el segundo asalto en cuatro días que ha habido en esta ciudad valenciana, donde a inicios de este año un atraco extremadamente violento a un chalé se saldó con la muerte de dos de los ladrones por disparos del propietario.

Llueve sobre mojado en Canals. Después del robo sufrido el viernes pasado por un comercial de joyas -al que sustrajeron mercancía valorada en más de 120.000 euros y que fue golpeado por sus asaltantes,-, el lunes, a pleno día, alrededor de las 12, dos encapuchados entraron en una vivienda del edificio El Teular, en la céntrica calle de Jaume I, donde sólo encontraron un niño de 10 años al que redujeron fácilmente.

"Entran a cualquier hora en cualquier casa, y tienes miedo, sobre todo por los tuyos"

El niño fue maniatado dentro de un armario de la casa con los ojos vendados tras abrir inocentemente la puerta a los delincuentes. Aunque no sufrió maltrato físico, fue amenazado y lloraba constantemente. Mientras tanto, los ladrones revolvieron la casa en busca de "dinero o joyas", según explica la policía, pero se fueron con las manos vacías. No había nada de valor en el domicilio.

El padre del niño fue el primero en regresar a casa tras realizar unas compras con su otra hija, de cinco años, y fue quien liberó al niño de su encierro en medio del susto por el estado en que se encontró su hogar.

Todo indica que los asaltantes, para acceder al edificio, se hicieron pasar por clientes de alguno de los seis negocios ubicados en las primeras plantas del inmueble. También puede ser que entraran tras otras personas porque el portero automático de las escaleras lleva incorporada una cámara.

Vecinos del inmueble afirman no haber oído nada. "Antes había miedo, pero pensábamos que los ladrones asaltaban los chalés de las afueras, a personas que tienen dinero. Pero ahora entran a cualquier hora en cualquier casa de gente que no es rica, y tienes miedo, sobre todo por los tuyos", confesaba una vecina indignada por el suceso.

Ante esta situación de alarma, el alcalde en funciones, Pascual Durà, ha anunciado que mañana mantendrá una reunión con el subdelegado del Gobierno en Valencia, Luis Felipe Martínez, para abordar una situación que califica de "excepcional".

Las conversaciones con el subdelegado han sido frecuentes a lo largo de 2006 ya que este asalto ha sido el tercero de relevancia en Canals en lo que va de año. Este tipo de robos tuvieron un dramático inicio en la población al empezar el año con el asalto en el domicilio de la familia Ramírez-Ferri, que se saldó con la muerte de dos de los ladrones a causa de los disparos efectuados por el empresario Francisco Martínez.

Tras estos hechos, que provocaron la reacción popular con manifestaciones tanto en Canals como en Valencia contra la delincuencia, ha habido dos juntas locales de seguridad, el Ayuntamiento ha aumentado a 21 los miembros de la plantilla de Policía Local y se ha acordado incrementar el número de agentes de la Guardia Civil de 16 a 35. Durà afirma que lo que hace falta es agilizar estas medidas para combatir la psicosis que cunde en la población. En estas circunstancias, advierte, "es muy complicado transmitir serenidad a la ciudadanía".