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Rubio denuncia que la ciudad de Valencia pagará 614.000 euros al año por una red de acequias en desuso

Sara Velert

El gobierno local de Valencia, dirigido por la alcaldesa Rita Barberá, del PP, firmará convenios con seis acequias cuyas canalizaciones discurren parcialmente bajo el asfalto de la ciudad. El Consistorio asumirá por 25 años su gestión y el coste de las obras para el desvío de ramales, su saneamiento o uso como parte de la red de alcantarillado. El pago a las acequias de Tormos, Favara, Rovella, Mestalla, Mislata y Rascanya ascenderá a 614.153 euros anuales.

El portavoz socialista, Rafael Rubio, y la concejal Carmen del Río, exigieron ayer explicaciones sobre un acuerdo que ven "anacrónico" y que mantendrá una red de acequias en "desuso", desligada ya en su mayor parte del alcantarillado. "El Ayuntamiento lo hará todo por nada", resumió Del Río.

Las acequias del Turia han servido tradicionalmente como red de vertido de Valencia, cuyo crecimiento ha sepultado ramales y cauces principales que apenas riegan ya una huerta presionada por el avance de la ciudad. El PP ha destacado en muchas ocasiones la inversión de más de 430 millones de euros para construir un alcantarillado en condiciones, pero aún usa al menos parte del entramado de dos acequias. En virtud de convenios de los años ochenta, según los datos facilitados por los socialistas, el Ayuntamiento pagó en 2001 un total de 332.773,27 euros a las seis comunidades de regantes, una suma que se redujo a 144.747 euros el pasado ejercicio, reducción "lógica" porque cada vez se usan menos. El nuevo acuerdo multiplica por cuatro la aportación a las acequias, que ni siquiera costearán su mantenimiento. "¿Cómo se come esto si se supone que tenemos resuelto el problema del alcantarillado, según el PP?", ironizó Rubio. Unas 30.000 viviendas vertían aún el año pasado a las acequias y muchos edificios tienen problemas de humedades, añadió Del Río.

El edil del Ciclo Integral del Agua, Ramón Isidro, defendió que se regularizan 125 kilómetros de acequias para su desconexión total del alcantarillado o adaptación en la renovación del saneamiento en diversos barrios, con un ahorro de 12 millones de euros. El edil subrayó que el Ayuntamiento "adquiere" las acequias, pero no aclaró por qué es renovable tras 25 años un acuerdo que habla de "cesión".

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Sobre la firma

Sara Velert
Redactora de Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1993, donde ha pasado también por la sección de Última Hora y ha cubierto en Valencia la información municipal, de medio ambiente y tribunales. Es licenciada en Geografía e Historia y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, de cuya escuela ha sido profesora de redacción.

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