Lerma anima a los socialistas a superar el cainismo imperante en la etapa del PP

Honradez y modestia. Son dos de los atributos que ayer sirvieron a políticos y empresarios para describir la trayectoria del que fue presidente de la Generalitat durante 13 años, el socialista Joan Lerma. Fue en la presentación del libro La huella de Lerma, biografía del político, donde el ahora portavoz del PSOE en el Senado animó a sus compañeros de partido a superar el cainismo y el conformismo que ha caracterizado la etapa de gobierno del PP.

Medio centenar de personas acudieron anoche a la presentación del libro, donde el periodista Vicente Lafora compone, a través de unas 60 entrevistas con políticos y empresarios, la biografía del político socialista valenciano. En las primeras filas, varios miembros de sus gobiernos -Antonio Birlarga, Emèrit Bono, Joan Romero, Martín Sevilla, Eugenio Burriel...- y un largo etcétera de dirigentes y ex altos cargos empresariales y sindicales que coincidieron en su etapa como presidente - José María Jiménez de Laiglesia, José Enrique Silla, Rafael Recuenco, Arturo Virosque, Salvador Fernández Calabuig, Emili Tortosa...- Y en la mesa de presentación del libro, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, que vino expresamente al acto, el líder de los socialistas valencianos Ignasi Pla y el propio autor del libro, Vicente Lafora.

El autor destacó de Lerma su decisivo papel en la conformación del autogobierno valenciano, así como su predisposición al pacto y a "buscar más lo que unía a los valencianos que lo que les separaba".

José Blanco -que, en los pasillos, y a preguntas de los periodistas se mostró encantado con el pacto alcanzado hace unos días por Ignasi Pla y Rafael Rubio en torno a la candidatura de Valencia-, rememoró del ex presidente su precocidad política: "Con 27 años fue consejero preautonómico, con 28 secretario general de los socialistas valencianos y con 32 presidente de la Generalitat", enumeró. Blanco describió a Lerma como una referencia imprescindible en la reciente historia valenciana, como "arquitecto" de la Generalitat y se mostró convencido de que Pla continuará a partir de 2007, "cuando gane la Generalitat", con el impulso modernizador que caracteriza a los socialistas. Pla, que se declaró heredero de la acción de gobierno de Lerma, destacó de su trayectoria su capacidad para anteponer los intereses ciudadanos a la política de símbolos. Fue precisamente el actual secretario general de los socialistas el que más subrayó "la honradez y modestia" que caracterizó su etapa de presidente.

El ex presidente, que cerró las intervenciones con palabras de agradecimiento a los que han participado en el libro, contrapuso la etapa de gran dinamismo que se vivió cuando estaba al frente de la Generalitat con "la de gran conformismo" de ahora y criticó que los gobiernos del PP se refugien en el victimismo. Lerma animó a los socialistas a "olvidar el cainismo y no deshacer todo lo anterior", en alusión a la acción de los gobiernos de los populares Eduardo Zaplana y Francisco Camps.