La inversión no confía

Los mercados de valores van dejando pasar el calendario que les llevará hasta las fechas clave para las decisiones sobre el precio del dinero con cierto pesimismo, a pesar de que abundan los analistas que consideran descontada la primera de las próximas subidas de los tipos de interés.

La Bolsa española volvió a protagonizar un episodio de exceso de optimismo, con una apertura positiva y un posterior retroceso debido a la ya habitual ausencia de compradores. El Ibex 35 terminó cediendo el 0,55%, pero conserva el nivel de los 11.200 puntos, mientras que los valores medianos ganaban el 0,10% y los pequeños cedían tan sólo el 0,13%.

Los indicadores económicos publicados ayer en Europa y Estados Unidos mostraban un curioso incremento de la confianza, que, evidentemente, no compartían la mayoría de los inversores, más apegados últimamente a los datos de la economía real que a los que muestran la opinión de algunos colectivos bienintencionados. Aun así, en Estados Unidos, donde la confianza de los consumidores subió por encima de las expectativas en el mes de junio, se imponía el temor al repunte del precio del petróleo y al subíndice de confianza sobre la situación actual, que perdió casi 1,5 puntos para quedar en 132,7.

En Alemania pasó desapercibido el índice IFO sobre confianza económica, cuya superación de las expectativas de los analistas no encontró eco alguno entre los inversores. La Bolsa de Francfort se anotó la mayor caída entre los principales mercados europeos, con el 1,01%, debido al mayor peso relativo de una posible subida de los tipos de interés frente al entusiasmo, más o menos razonable, de los índices de confianza.

La contratación en el Mercado Continuo subió hasta 4.733,70 millones de euros gracias a la actividad institucional, pero las operaciones "abiertas" descendieron hasta 2.076,91 millones.