Barberá revisará el plan de Mestalla y el Valencia presume de regalarle suelo

El gobierno local del PP y el Valencia CF rechazaron ayer, cada uno desde su perspectiva, las críticas de la oposición socialista y de EU-L'Entesa al proyecto de recalificación del solar de Mestalla, fruto del convenio entre el club y el Ayuntamiento para derribar el estadio, urbanizar el terreno y construir un nuevo campo en la avenida de Cortes Valencianas.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, aseguró que el plan de recalificación deberá adecuarse "a los criterios que crea convenientes el Ayuntamiento". Ante el rechazo de la oposición a la propuesta del Valencia CF y la acusación de que el PP se pliega a los intereses de una entidad privada, la alcaldesa replicó: "No vamos a hacer dejación de nuestras responsabilidades". Barberá destacó que sólo hay una propuesta, sujeta a revisión y cambios. "Puede estar todo bien o todo mal", dijo la alcaldesa. En cualquier caso, el plan deberá atenerse al convenio y los usos y edificabilidad planteados, respondió Barberá al ser preguntada sobre qué ocurrirá si al Valencia no le salen las cuentas.

La duda sobre este punto surgió el martes de las declaraciones sobre el plan del teniente de alcalde, Alfonso Grau, quien subrayó que al club sólo le corresponde la edificabilidad de su parcela, que serían unos 56.000 metros cuadrados de techo, y no los 89.350 de la unidad de ejecución delimitada, en la que hay también suelo y viales públicos. Un reparto que reduce las expectativas del club, que espera enjugar parte de sus deudas con la operación urbanística. En un intento de atajar la polémica, Grau proclamó también que el Ayuntamiento "no va a regalar suelo público".

En cambio, el club, al parecer, sí hará un obsequio al Consistorio. En un comunicado, el Valencia afirmó ayer que "va a regalar a la ciudad más de la mitad" del suelo de su parcela de unos 33.000 metros cuadrados para dotaciones y zona verde. Sin embargo, más adelante, el club explica que la manzana colindante, en la que está el nuevo Ayuntamiento y que conforma con Mestalla el ámbito de la actuación urbanística, no se ha tenido en cuenta "para cumplir las reservas dotacionales exigidas legalmente a la remodelación" del terreno del estadio. Defiende también el club que tendrá menos edificabilidad que el promedio de la zona. El coeficiente de edificabilidad del distrito de Pla del Reial es de 1,79, mientras que el fijado para la unidad de Mestalla es del 1,82, pero el Valencia insiste en que podría haber logrado más en una parcela que ahora es deportiva, con un coeficiente de 1,2, y pasará a urbana con la recalificación. El comunicado exige "mayor rigor" a la oposición y asegura que "en ningún momento" el club recibirá más edificabilidad de la que le toca.