_
_
_
_
_

El Poder Judicial multa con 2.150 euros a un juez por faltar al respeto a dos compañeros

El Consejo General del Poder Judicial acordó ayer sancionar con 2.150 euros de multa al magistrado Antonio Pedreira, de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. La Comisión Disciplinaria del órgano de gobierno de los jueces consideró que Pedreira faltó al respeto al presidente del Tribunal, Javier María Casas, y al magistrado Emilio Fernández de Castro, ambos de su misma sala, que con sus votos inadmitieron a trámite una querella de la empresa Capital Toreo contra el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González (PP), por el concurso para la gestión de la plaza de Las Ventas.

Pedreira redactó un voto particular -a favor de admitir la querella- en el que decía que no estaba "dispuesto a retroceder" en la defensa de su "independencia judicial" y del derecho a expresar su "libre e independiente convicción". "Cualquier amenaza física o psíquica, al parecer eventualmente anunciadas y producidas en parte, no van a doblegar mi libertad e independencia profesionales, ni el ejercicio legítimo de mi quehacer y obligación constitucionales", escribió.

El instructor del expediente abierto contra él considera que Pedreira no pudo probar esas amenazas ni el hecho de que perturbaran su independencia como juez. Por ello, la comisión lo considera autor de una falta grave de "falta de respeto a los superiores en el orden jerárquico, en su presencia, en escrito que se le dirija o con publicidad", y le impone una multa de 2.000 euros. También le obliga a pagar otros 150 euros por falta leve "de desconsideración con iguales en el orden jerárquico".

La decisión se aprobó con los votos a favor de los consejeros propuestos por el PP Enrique Míguez y Carlos Ríos, y con el del vocal de consenso (a propuesta del PP y del PSOE) Agustín Azparren. La presidenta de la comisión, Monserrat Comas, y la vocal María Ángeles García (ambas propuestas por el PSOE) votaron en contra al considerar que la conducta no era "falta de respeto" sino "utilización en resoluciones judiciales de expresiones innecesarias e improcedentes".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_