"Le gano yo"
Laura Gómez y Sugoy Uriarte son novios y ambos recientes campeones de España sub 23 de yudo con el Valencia Club
Laura Gómez tiene 22 años, practica el yudo desde los cinco y es campeona de España sub 23 en la categoría de 57 kilos, título que consiguió hace varias semanas en Madrid. En la categoría masculina de 66 kilos el ganador fue Sugoy Uriarte, de 21 años, practicante de este deporte desde los cuatro. Sus caminos corren paralelos. Ambos fueron campeones de España sub 15 el mismo año, compiten por el Valencia Club de Judo y... son pareja. Desde su etapa de cadetes decidieron que seguirían los pasos de sus padres y hermanos y se dedicarían al yudo. "Llega un momento en que tienes que elegir si quieres entrenarte o hacer otras cosas", cuenta Laura. "Cuando fui campeón de España junior lo tuve claro, dejé de practicar otros deportes", añade Sugoy, un vitoriano que llegó a Valencia para estudiar Ingeniería Técnica Industrial, en la rama de Electrónica, y progresar en el yudo. Actualmente cursa el segundo ciclo del título, en la especialidad de Organización Industrial. Laura es alumna de cuarto curso de Administración y Dirección de Empresas. Los estudios se combinan con los entrenamientos, los viajes y las competiciones. ¿El tiempo libre? Apenas existe.
Ambos compaginan los estudios con los entrenamientos: "Un día nuestro es horrible"
"¿Cómo es un día nuestro? Horrible. La gente que vea lo que hacemos pensará que estamos locos", admite Laura. La jornada comienza bien pronto en la Universidad, sigue a la una del mediodía en un gimnasio de Patraix "para hacer un descansillo de los estudios" un par de horas y continúa con las prácticas universitarias por la tarde. A última hora, toca entrenamiento de yudo en el pabellón Font de Sant Lluís. Todo eso cuando no viajan por España o por el extranjero para participar en algún campeonato. Recientemente regresaron de competir en Eslovenia en las rondas previas del Campeonato de Europa sub 23, que se disputa en noviembre en Moscú. Túnez, Estambul, Barcelona... la maleta está siempre lista. De modo que en su tiempo libre apenas tienen ganas de moverse de casa. "Casi todos los fines de semanas tenemos competición. Si no hay nada, preferimos estar tranquilos, sin salir", explica Sugoy. "No nos queda ninguna gana de viajar. No queremos ver más aviones ni maletas. Es un poco lío compaginarlo todo, a los amigos casi no les dedicamos tiempo", añade Laura. ¿Y vale la pena? "Es difícil entenderlo para alguien que no lo vive, pero para nosotros es una satisfacción", responde el yudoka. Apenas salen por la noche, "alguna vez en verano", pero no de manera habitual, "como hacen los amigos", y deben siempre controlar muchísimo su alimentación para no superar el peso de sus categorías. Las cenas universitarias en cualquier bar, por ejemplo, son todo un lujo.
El yudo les atrapó desde la infancia. Los padres de Laura, Salvador y Gloria, fueron judokas, él campeón de España senior y seleccionador del equipo nacional; y ella tercera de España senior. Actualmente regentan el gimnasio donde se entrenan por las mañanas su hija y su novio, y Salvador les entrena en la parte táctica. Otro ex luchador, Sergio Doménech, es el encargado de su preparación física, el que les "aguanta" todos los días y está pendiente de ellos cada momento. "Salvador es la persona que más sabe de yudo en España, y Sergio ha sido uno de los mejores competidores", afirma Sugoy, el tercero de cuatro hermanos aficionados al yudo.
Las carreras de Laura y Sugoy son muy prometedoras. La yudoka ha sido siete veces campeona de España, y Sugoy otras cinco. Entonces, ¿quién ganaría un combate entre ambos? "Le gano yo, estoy segura", asegura Laura mientras ambos ríen.
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