La Politécnica cierra un acuerdo de intercambio con una de las mejores universidades de China

El rector de la Universidad Politécnica de Valencia, Juan Juliá, volvió impresionado de su reciente viaje a China. Cerró allí acuerdos con cuatro universidades, pero el más cotizado de largo fue el suscrito con la de Tsinghua. Situada al noroeste de Pekín, especializada en estudios de posgrado, con algo más de 20.000 estudiantes y un gran parque científico, la universidad aparece como una de las más prestigiosas del país en las clasificaciones internacionales. Su campus, admite Juliá, es "mucho mejor" que el de Vera y que cualquier otro que el rector haya visitado en España.

El acuerdo prevé el intercambio de estudiantes y profesores desde el curso que viene, y deja abierta la puerta al desarrollo de programas de investigación.

La universidad china está interesada especialmente en la titulación de Administración y Dirección de Empresas (ADE) de la Politécnica, que tiene tres grupos, uno de ellos en inglés, 150 alumnos y la nota de corte más alta en su especialidad de todas las universidades valencianas.

En Tsinghua "casi la mitad de la docencia es en inglés", asegura Juliá, lo que facilitará la llegada de alumnos de la Politécnica. La universidad viene ofreciendo, además, cursos de chino para sus estudiantes desde hace algunos años.

Los chinos quedaron satisfechos con el alto número de alumnos que realizan prácticas en empresas en la facultad de ADE de la Politécnica -prácticamente todos-. Y Juliá tiene la intención de que los alumnos valencianos enviados a China puedan no solo recibir clases, sino también realizar prácticas o el proyecto fin de carrera en empresas asentadas allí.

Hay todavía otro motivo para el interés de la universidad china por la Politécnica. El castellano se abre paso con fuerza como lengua estratégica en el país asiático. Una llave para la apertura hacia España, pero sobre todo hacia Latinoamérica. Y la Politécnica se precia de ser la universidad española con más presencia en los países de habla hispana.

El acuerdo, por el lado de la universidad valenciana, se enmarca en lo que Juliá describe como "una política mucho más selectiva a la hora de firmar acuerdos". Una forma de reconocer que hasta ahora se había decantado por la cantidad.