El Ajax como fuente de inspiración

José María Amorrortu, nacido en Bilbao hace 52 años, siempre ha tenido predilección por el modelo holandés de trabajo con la cantera. La escuela del Ajax ha sido su constante fuente de inspiración, aunque no la única. En su época de director del fútbol base del Athletic, Holanda marcó el camino a seguir, pero eso no le impidió abrirse a otras escuelas, principalmente la francesa -tanto el Nantes de Raynald Denoueix, al que recomendó para la Real Sociedad, como el Auxerre del incombustible Guy Roux-, así como al modelo argentino, más difícil de importar por la distinta sociología humana entre Suramérica y Europa.

A Amorrortu le gusta que los equipos inferiores utilicen el mismo patrón de juego, inspirado en las necesidades del primero, y que los más jóvenes compitan en inferioridad de edad. En el Athletic se utilizaba un esquema de tres centrales y laterales largos a la búsqueda del futbolista polivalente y permanentemente exigido por las circunstancias del juego. Un modelo de fútbol total que, sin embargo, no le ahorró críticas por la escasa producción de delanteros, aunque él siempre creyó que la camada estaba al caer. Desde Ernesto Valverde hasta Javier Clemente, Lezama no ha dejado de dar futbolistas al Athletic que nacieron bajo el modelo de Amorrortu.

También recibió críticas por la falta de títulos de los equipos inferiores, pero él siempre creyó que la construcción de un futbolista era más valiosa que un trofeo.

Estudioso del fútbol base, sus compañeros en el Athletic y en el Zaragoza -su último equipo como futbolista- siempre dijeron ver en él a un entrenador en el campo, además de a un fino interior con un buen disparo. Desde entonces se ha movido entre los banquillos -el último fue el de la Real, que le despidió antes de concluir la última temporada- y los despachos. Ahora vuelve a los orígenes con la cantera amplia y poderosa del Atlético y al amparo de un técnico como Javier Aguirre, que siempre ha demostrado un especial interés por el fútbol base.