El fiscal pide siete años de cárcel para Tony King por intento de violación

Tony Alexander King volvió a sentarse ayer en el banquillo de los acusados. El ciudadano británico- condenado a 36 años de prisión por el asesinato de Sonia Carabantes y acusado de haber matado a la joven de Mijas Rocío Wanninkhof- respondió en la Audiencia Provincial de Málaga de un delito de agresión sexual en grado de tentativa supuestamente cometido en Benalmádena en junio de 2001. Tanto el fiscal como la acusación particular piden para él siete años de prisión, cinco por el presunto intento de violación y dos por las lesiones que sufrió la víctima, que tardó 30 días en curarse.

Tony King llegó a los juzgados de Málaga a las 8.55 en un furgón de la Guardia Civil en el que viajaban otros reclusos. Al bajarse del vehículo celular repitió la escena acostumbrada cada vez que comparece ante la justicia. "Soy inocente. No he hecho nada", gritó King, que tuvo tiempo de añadir que el de ayer "es un juicio económico".

Los hechos juzgados sucedieron la madrugada del 24 de junio de 2001 en la zona de Puerto Marina. La víctima, una joven enfermera, había ido a buscar su coche para recoger a su familia, a la que había dejado en una fiesta de San Juan en la playa. Al abrir la puerta del vehículo, estacionado en una callejuela oscura, fue empujada hacia el interior del coche, donde cayó boca abajo. Entonces, el presunto agresor comenzó al golpearla en todo el cuerpo e intentó desnudarla "con intención de penetrarla", según la Fiscalía. En un momento, la mujer consiguió girarse y expulsar del coche a su atacante a patadas.

Dejó un cuchillo

Después de que la víctima bloqueara la cerradura del vehículo, el agresor -según ella Tony King- huyó supuestamente en un descapotable que conducía otra persona y que estaba aparcado a pocos metros, según la víctima. La mujer aseguró que, en su huida, King perdió un cuchillo que fue encontrado bajo el asiento del copiloto. En esta arma no se han encontrado huellas.

La víctima, que ayer testificó oculta tras un biombo, reconoció "sin ninguna duda" en el juicio a King como su presunto agresor. La víctima, que denunció los hechos inmediatamente, identificó por primera vez a King como la persona que intentó violarla cuando vio su imagen en la televisión en septiembre de 2003, cuando el ciudadano británico fue detenido acusado de matar a la joven de Coín Sonia Carabantes.

Tanto la acusación particular como la Fiscalía, que pedían cinco años de prisión para King en sus conclusiones provisionales por un presunto delito de agresión sexual en grado de tentativa, elevaron ayer a siete años su petición definitiva para imputarle también un delito de lesiones. Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió la fractura de un dedo, así como erosiones en la cara, en la nuca, en el tórax y un esguince cervical. La defensa solicitó la absolución de King al no apreciar verosimilitud en las declaraciones de la víctima. El juicio quedó visto para sentencia.