Suspendido por tercera vez el juicio a cuatro antimilitaristas

La incomparecencia de tres agentes de la policía nacional y de un guardia de seguridad citados en relación con la interrupción de la circulación de un tren cargado con material militar con destino a Zaragoza, que protagonizaron cuatro activistas antimilitaristas, obligó ayer a la suspensión del juicio en Valencia. El fiscal pide para los cuatro acusados de desórdenes públicos un año de prisión. Los hechos ocurrieron el 17 de octubre de 2004 cuando los imputados se colocaron en el trazado de la vía interrumpiendo la circulación de un tren con destino a Zaragoza y cargado de material militar para unas maniobras en el acuartelamiento de San Gregorio. Según los procesados, la policía disolvió la acción dos horas y media después de que se iniciara sin que se registraran incidentes. Los antimilitaristas aseguran que su acción, neutralizada por la policía, se desarrolló con respeto por la integridad física de las personas implicadas. De acuerdo con su versión, se señalizó la presencia del bloqueo, el tren se encontraba parado en su estación de carga, los participantes llevaban pancarta y ropa reflectante y no se cortó ninguna vía de circulación ordinaria sino sólo la que iba a recorrer el tren militar. Los agentes defienden que hubo resistencia y desobediencia. Renfe reclama daños por lo ocurrido.