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Crónica:Fútbol | 37ª jornada de Liga
Crónica
Texto informativo con interpretación

El Cádiz regresa a Segunda

El Getafe se sobrepone a la diana de Lobos y golea a los andaluces en los últimos 20 minutos

José Marcos

De nada le sirvió al Cádiz disponer una caravana de autobuses para que el aliento de su hinchada facilitase el milagro. El cuadro de Víctor Espárrago certificó en Getafe, ante 3.000 seguidores, su vuelta a Segunda. A un paso estuvieron los gaditanos, que no dependían de sí mismos, de mantener el suspense sobre su futuro. Porque, durante 49 minutos, hasta que se desinfló el globo, el gol de Lobos hizo soñar con la proeza a los 3.000 aficionados llegados desde Cádiz que se agolpaban en uno de los fondos. El mediapunta argentino bajó con exquisitez técnica un balón lejano que procedía del campo gaditano, y pese a la persistencia de Pulido, se inventó un disparo que pilló a Luis García en falso. El portero se las prometía felices, tanto que estaba ligeramente adelantado y no se imaginaba que el cuero iba a dibujar por encima suya una parábola que le sacaría de su ensimismamiento. El séptimo acierto de Lobos hacía viable la quinta victoria del Cádiz lejos de su estadio. Por el momento.

GETAFE 3 CÁDIZ 1

Getafe: Luis García; Contra, Pulido, Tena, Pernía; Diego Rivas, Vivar Dorado; Redondo (Güiza, m. 46), Riki, Gavilán (Craioveanu, m. 66); y Paunovic (Pachón, m. 79).

Cádiz: Limia; Vella, Abraham Paz (Varela, m. 54), Berizzo, Raúl López; Enrique (Estoyanoff, m. 74), Fleurquin, Bezares, Jonathan Sesma; Pavoni (Morán, m. 58) y Lobos.

Goles: 0-1. M. 21. Lobos sorprende a Luis García con un balón bombeado desde el vértice del área. 1-1. M. 70. Pulido, tras un barullo en el área. 2-1. M. 80. Centro de Güiza que Pachón cabecea a la red. 3-1. M. 90. Riki, a pase de Pachón, marca de disparo raso y cruzado en un contragolpe.

Árbitro: Pérez Lasa. Amonestó a Diego Rivas, Vivar Dorado, Güiza y Bezares.

12.000 espectadores en el Alfonso Pérez.

Al Getafe ni le iba ni le venía el partido, pero nunca dio esa impresión. Incluso los cambios le salieron bien a Schuster, que dio sus últimos minutos en Liga a Craioveanu. También Pernía, la temporada que viene en el Atlético, decía adiós al coso. Su ausencia de la lista de Luis quizás influyó en sus excesos atacantes, que debía esperar Enrique, porque durante un rato largo llegó a la línea de fondo y centró una decena de veces.

A cuatro puntos de la salvación, el Cádiz saltó algo alocado a por los tres puntos. La estrategia kamikaze le valió para adelantarse en el electrónico. Entretanto, el Getafe seguía imperturbable, amenazando el arco de Limia más que nada por la enormidad de espacios que dejaban las ansias goleadoras de la marea amarilla. Vivar Dorado y Diego Rivas lograron lanzar varios contragolpes peligrosísimos. Paunovic desaprovechó la mayoría, en una jugada que se repitió hasta el infinito; pase en largo desde la línea de tres cuartos, zancada poderosa del serbio y chut raso y demasiado cruzado. La mitad de los tiros de los madrileños fueron del balcánico, que aun así es el hombre gol del Getafe -junto con Pernía- con diez tantos. Limia y mil encomendaciones a los santos mantenían con vida a los gaditanos.

Hasta que Pulido empató, claro. El chico para todo de Schuster, lateral, central o lo que haga falta, anotó su segundo gol de la campaña después de una retahíla de fallos, en una escena propia de los hermanos Marx. A la salida de un córner, el balón voló al segundo palo pero, como Tena golpeó al aire y mandó a Riki a la hierba, pues le llegó botando a Pulido. Para darle emoción al asunto, la pelota entró en la portería entre una maraña de piernas.

Fue el principio del fin, en el que Güiza fue determinante. Schuster le había castigado con el banquillo hasta que, vistas las cosas, decidió que le sacaría mejor rendimiento en el campo. Así que Güiza sustituyó a Redondo y el Getafe atacó con más criterio. El andaluz es letal con muchos metros por delante y, si en las defensas el orden da paso a la anarquía, resulta fulminante. Resulta curioso que un futbolista tan individualista asista que da gusto. En el carril del ocho, levantó la cabeza y se la centró a Pachón, que cabeceó a la red. 2-1 y adiós a las chirigotas. La conexión se repitió a los pocos minutos, sólo que esta vez Pachón, regateó a Bezares, el único defensor, y se la regaló a Riki. Y éste no falló. El Getafe se dio a la fiesta y manteó a Craioveanu. La afición del Cádiz no fue menos y despidió a sus muchachos entre abrazos y aplausos.

Los jugadores del Cádiz se dirigen al fondo a lanzar las camisetas a sus seguidores.
Los jugadores del Cádiz se dirigen al fondo a lanzar las camisetas a sus seguidores.EFE

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Sobre la firma

José Marcos
Redactor de Nacional desde 2015, especializado en PSOE y Gobierno. Previamente informó del Gobierno regional y casos de corrupción en Madrid, tras ocho años en Deportes. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Trabajó en Starmedia, Onda Imefe y el semanario La Clave.

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