La moto en el maletero
La Monkey Bike lanza una réplica de la Honda DAX que se puede plegar y llevar en el coche
MONKEY BIKE es una empresa española que diseña y fabrica sus motos en China, pero buscando la calidad y acabado que se exige en Europa. Apenas lleva un año en el mercado y acaba de lanzar la MB 110 D, una copia de la Honda Dax que la marca japonesa ha comercializado desde los años setenta y que se ha convertido en una de las motos más vendidas de la historia. Tiene un precio de 1.482 euros y se ofrece en una variada gama de colores, algunos tan atrevidos como los rosa chicle, turquesa, pistacho o melocotón, y otros más serios, como el negro y el burdeos. El diseño de la MB 110 D es muy simple y funcional: una estructura de chapa estampada en forma de T hace de chasis y carrocería, sirve de base al asiento y de soporte para el motor. De momento se ofrece con un propulsor de 110cc y cuatro tiempos, está homologada para dos plazas y exige matriculación y carné A1 o B. Pero más adelante llegará una variante más económica con motor de 50cc también de cuatro tiempos que se venderá como ciclomotor.
La MB 110 D es ideal para circular en ciudad y gracias a sus reducidas dimensiones sirve como vehículo de apoyo para autocaravanas, barcos... Mide sólo 1,5 metros de largo, pesa 75 kilos y cabe en el maletero de un coche grande: el manillar se pliega fácilmente con dos palomillas de plástico.
MECÁNICA MUY SIMPLE
El motor es un monocilíndrico cuatro tiempos de 110cc refrigerado por aire con el cilindro situado en posición horizontal. Se alimenta con un carburador muy sencillo y, aunque la marca no declara la potencia, rinde entre 6 y 7 CV. El arranque es eléctrico, pero dispone también de un pedal por si se queda sin batería. El cambio tiene cuatro marchas, embrague multidisco bañado en aceite y transmisión por cadena.El bastidor rinde culto a la sencillez y consta de dos piezas de chapa estampada soldadas que sirven también de depósito de carburante, aunque con una capacidad limitada de apenas 2,5 litros. Las suspensiones están formadas por una pequeña horquilla telescópica hidráulica en el tren delantero y un basculante con dos amortiguadores atrás, y se completan con unas ruedas pequeñas de 10 pulgadas, como las de los escúteres, aunque con llantas de radios. Por último, incluye unos frenos con disco de 155 milímetros delante y tambor de accionamiento mecánico atrás. Además incorpora caballete y pata de cabra lateral para aparcar
UNA ARDILLA EN LA CIUDAD
Con sus ajustadas medidas, la MB 110 D se mueve como una ardilla en el tráfico urbano y sus ventajas aumentan cuanto más congestionado es el atasco. Tiene una posición de conducción cómoda, pero si el conductor mide más de 1,80 metros de altura se convierte en monoplaza porque no queda espacio libre para el segundo pasajero. La mecánica - motor, cambio y embrague- funciona correctamente y ofrece unas prestaciones suficientes para circular bien en ciudad. Alcanza con relativa facilidad la velocidad máxima (90 km/h. de marcador) e incluso el cambio de marchas se queda un poco corto, como si le faltara una quinta velocidad de desahogo.En contrapartida, la estabilidad es algo justa, pero no se puede pedir mucho más en una moto tan pequeña y sencilla. Al menos frena bien y cumple en diseño y calidad de componentes.La MB 110 D es un capricho para la ciudad, el equivalente al popular VW Escarabajo entre las motos utilitarias. Pero lo mejor es que se puede adquirir a un precio razonable y en colores muy atrevidos
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