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Reportaje:Automovilismo | Gran Premio de Italia de Fórmula 1

El sueño de una escudería española

El equipo de Alfonso de Orleans y BCN Competición quieren un puesto en la parrilla de salida

Los insistentes rumores sobre la crisis económica por la que atraviesa la escudería Midland, propiedad del magnate ruso Alex Shnaider, han vuelto a poner de actualidad el interés de Alfonso de Orleans por comprar este equipo y convertirlo en el primero español que compita en el circo. De Orleans es propietario de la firma Racing Engineering, que corre en GP2, la antesala de la F-1. Sin embargo, en el circuito de Imola, el proyecto pareció enfriarse cuando Shnaider desmintió las palabras que habría pronunciado tan sólo unas semanas antes y aseguró que nadie habla de vender Midland.

"Entiendo que ahora no quiera entrevistarse conmigo porque quizás daríamos credibilidad a los rumores que están circulando por el paddock en relación con este equipo", indicó De Orleans; "sin embargo, habrá que ver cómo evolucionan las cosas de aquí hasta el final de la temporada. Y, si no podemos comprar Midland, igual hay otro equipo que se vende. Lo que está claro es que España tiene capacidad más que sobrada para tener un equipo en la F-1 y que tendríamos un nivel más alto del que tienen los equipos de la cola actualmente".

Los impulsores creen que el equipo sería "mejor que los que están ahora en la cola"
El presupuesto anual de mantenimiento sería de unos 100 millones de euros

A pesar de que cuenta ya con una estructura muy consolidada, De Orleans considera que la mejor forma, y tal vez la única, de entrar en la F-1 es adquiriendo un equipo. "Si no me inscribí en la lista de los que querían competir en la F-1 fue porque sabía que habrá solamente una plaza más y probablemente se la darán a David Richards de Prodrive [ex director de equipo de BAR Honda]. El camino es comprar, pero tampoco a cualquier precio: si me piden 500 millones de euros, no me interesa. Pero, después, mantener un equipo a un nivel aceptable puede tener un coste de unos 100 millones por temporada. Y creo que este dinero sí puede encontrarse en España".

Al margen de la propuesta de Racing Engineering, el único equipo español que ha presentado su solicitud para entrar en la F-1 es el de GP2 Barcelona Competición, propiedad de Jaume Pintanel y del argentino Enrique Scalabroni, ex ingeniero proyectista de Ferrari que pasó por varios equipos de la F-1 como Williams y Lotus y que, además, jugó un papel determinante en el proyecto del equipo Peugeot que ganó la famosa carrera de resistencia de Le Mans con un coche diseñado por él. Más recientemente, en un proyecto tecnológico realizado en Japón, ha sido el responsable de diseñar, desarrollar, construir y competir con los motores Asiatech F-1.

"Aunque es difícil que nos elijan, hemos hablado varias veces con Bernie Ecclestone

y tendremos ocasión de volver a hacerlo para exponerle más detalladamente nuestro proyecto", explica Pintanel; "en España hay muchas empresas que están realizando ya componentes para la F-1: varias en Barcelona, Madrid, Toledo y Valencia. Y estamos trabajando en un amplio proyecto de tecnología punta para la alta competición y la aeronáutica en el que habría capital español, asiático, europeo y brasileño. Pero lo más importante es que nuestra escudería mantendría el 80% del personal español y estaría ubicada en nuestro propio territorio".

La decisión sobre la parrilla de 2008 se tomará durante la próxima semana y hay 22 solicitudes, entre las que se encuentra la de Richards, pero también otra de McLaren, que quiere construir un segundo equipo dirigido por el ex piloto Jean Alesi, y otra de Paul Stodart, que quiere recuperar el nombre de Minardi para la F-1.

Al menos dos de los equipos solicitantes quieren contar con el ingeniero español Joan Villadelprat, que posee una amplia experiencia como director técnico de varios de los mejores equipos de F-1.

Scalabroni baraja la posibilidad de que alguna de las once escuderías que actualmente compiten en la F-1 decida retirarse. "Todo va a depender de lo que decida la Federación Internacional. No es seguro que los once equipos actuales sean los elegidos; es posible que alguno de ellos arroje la toalla. Así que puede ser que quede más de una plaza libre". Al propio tiempo, el ingeniero argentino también barrunta la posibilidad de que la FIA abra la puerta hasta a un máximo de 14 equipos en vez de los doce previstos, lo que facilitaría su candidatura.

Alfonso de Orleans (en el centro), con Javier Villa (a la izquierda) y Adam Carroll, pilotos de GP2.
Alfonso de Orleans (en el centro), con Javier Villa (a la izquierda) y Adam Carroll, pilotos de GP2.REUTERS

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