Una menor pide ayuda médica tras llegar a Barajas con 20 bolas de cocaína en el estómago

Una joven, menor de edad, fue detenida el pasado día 19 en el aeropuerto madrileño de Barajas con unas 20 bolas de cocaína en su estómago e intestinos. La menor, de 16 años, vecina de un municipio del norte de la Comunidad de Madrid, confesó a los agentes policiales, nada más pisar suelo español, procedente de Santo Domingo, que temía por su vida y les pidió ayuda. Según confesó, llevaba en su organismo cerca de 20 cápsulas de cocaína.

Trasladada urgentemente a un hospital de Madrid, la joven desveló que en su equipaje llevaba, además, tres botes de desodorante llenos de cocaína, en su interior descubrieron una sustancia blanca compacta que resultó cocaína de gran pureza. Su peso se acercaba a los 290 gramos; los otros 200 iban en las cápsulas que la menor se había tragado en Santo Domingo.

Los agentes de Barajas la trasladaron al servicio de urgencias del hospital Ramón y Cajal de Madrid. El temor de los médicos del hospital era que, tras casi 10 horas de viaje, reventase alguna de las bolas o cápsulas dentro del organismo de la menor, lo que habría puesto en serio peligro su vida.

Según fuentes jurídicas, la detención se produjo cuando la joven iba a pasar la aduana del aeropuerto madrileño procedente de Santo Domingo (República Dominicana).

Los agentes de Barajas, que suelen prestar especial atención a los viajeros y equipajes procedentes de países latinoamericanos, pidieron a la menor que se identificase. Al instante, comprobaron que la chica (cuyo nombre se omite por tratarse de una menor) figuraba como desaparecida de su domicilio.

Al verse rodeada de agentes policiales, la chica, de origen iberoamericano pero con residencia en España, se derrumbó. En ese momento advirtió a los agentes de que en sus intestinos llevaba una gran cantidad de cápsulas de cocaína. Y les pidió ayuda. La menor explicó que la cocaína se la habían hecho tragar en Santo Domingo para traerla a España a cambio de 3.000 euros.

Al tratarse de una menor, el caso ha sido derivado al grupo policial especializado en menores -el Grume-, así como a la Fiscalía de Menores de Madrid, que dirige Manuel Moix.