Valdo sufre rotura de uréter

Las lesiones se muestran crueles con Valdo. Cuando cuenta para Javier Aguirre, consigue la titularidad y empieza a disfrutar con el fútbol, el leonés acaba en el hospital. Ya le ocurrió en diciembre, en el encuentro contra el Madrid. Entonces, el jugador de Osasuna encadenaba su tercer partido consecutivo desde el principio. Pero una entrada de Roberto Carlos, cuando todavía no se habían cumplido los primeros 20 minutos, le dejó en la camilla y con un tobillo roto por tres sitios. Ambos se cruzaron entonces palabras muy duras.

El pasado miércoles, contra la Real Sociedad, Valdo cumplía su cuarto partido en el once titular, algo bastante complicado en Osasuna, el equipo que más rotaciones lleva a cabo en la Primera División. En un balón por alto, el que fuera canterano del Madrid no saltó y el central realista, Viáfara, le arrolló con fuerza. La cadera del colombiano golpeó en el cuello de Valdo, quien cayó al suelo con la mala fortuna de que todo su peso se cargó sobre el codo, que se le clavó en el abdomen. Tras perder momentáneamente la consciencia, tuvo que volver a ser sacado en camilla como contra el Madrid. En el vestuario comenzó a vomitar, lo que junto a los signos de dolor y a lo extraño del golpe encendió las luces de alarma entre los médicos del cuadro rojillo.

Inmediatamente fue llevado a la clínica San Miguel. En esos momentos aún no se sabía la gravedad del golpe y todo apuntaban a un simple traumatismo. El médico del club, Jorge Fernández indicó: "Se quedará en observación y mañana se irá a su casa, pero dependiendo de las pruebas, ya que en este tipo de golpes nunca se sabe si puede haber algo más".

La prevención resultó casi un seguro de vida. En las pruebas, los doctores del centro sanitario comprobaron que algo no funcionaba en el aparato excretor. Entonces fue intervenido de urgencia por "un traumatismo renal derecho cerrado y urinoma perirrenal", ya que el riñón afectado podía encontrarse en peligro, algo que, en principio, no parecía posible.

Ayer, realizados numerosos análisis, en el hospital de Navarra, Valdo tuvo que ser nuevamente intervenido quirúrgicamente por los servicios de Urología de una de rotura del uréter, que ha tenido que ser sustituido. "Se trata de una lesión sumamente rara e infrecuente", explicó el doctor Javier Aldave, uno de los que le intervinieron. "Se ha optado por una cirugía mínimamente invasiva, tras la cual se espera que en una, dos o tres semanas la zona quede regenerada. En la segunda intervención se ha procedido al recambio del catéter ureteral derecho doble J, que será retirado en cuatro semanas. Con esta cirugía conservadora se ha preservado el riñón y éste sigue trabajando al ciento por ciento. Su recuperación será total y no tiene por qué tener ninguna secuela ni en su vida deportiva ni en la personal", explicó. "Se espera la restitución del sistema excretor afectado con estas medidas", concluyó.

De momento, Valdo deberá permanecer en el hospital entre tres y cinco días para observar y vigilar su situación. Después, ya en su residencia, los médicos estiman que estará de baja entre ocho y doce semanas a causa de la lesión. Es decir, con seguridad se perderá todo lo que resta de Liga. Una temporada que podía haber acabado en tragedia de no mediar la rápida intervención médica.