La Fiscalía recurre la exculpación de la esposa del ex director del aeropuerto bilbaíno
La Fiscalía del Tribunal Superior vasco ha recurrido el auto de un juzgado bilbaíno que deja al ex director del aeropuerto de Bilbao, Segismundo López-Santacruz, como único imputado en la causa seguida contra él por presunta estafa. La titular del Juzgado de Instrucción número 7 estimó que los delitos que se le imputaban a su esposa, Laura Hernández, no tienen peso para mantener la acusación contra ella. Se le acusaba de cohecho, malversación de caudales públicos y falsedad en documento oficial en grado de cooperación y complicidad. El auto, dictado el pasado 16 de febrero, agregaba que esos delitos sólo pueden cometerlos funcionarios, condición que no tiene la esposa de López-Santacruz.
Los argumentos de la juez Paula Isabel Crespo no son compartidos por la Fiscalía, que hace cinco años presentó la primera denuncia formal contra el ex director por su gestión al frente del entonces aeropuerto de Sondika entre 1997 y 2001. En un escrito fechado el pasado 23 de febrero, la fiscal jefe, María Ángeles Montes, señala que la situación de Laura Hernández es diferente a la de la madre del ex director, Ángeles Pérez Alonso, quien también estuvo imputada, pero las actuaciones en su contra se sobreseyeron debido a su avanzada edad.
Ambas mujeres tenían a su nombre cuentas bancarias con ingresos no justificados, como certificó un informe del perito nombrado por el juez. Este estudio descubrió en conjunto casi 950.000 euros sin justificación en las cuentas bancarias de los tres.
Conocimiento
La fiscal señala que la madre de López-Santacruz "por razón de su edad pudiera haber sido utilizada por aquel sin adecuado conocimiento de los hechos", pero sostiene que en el caso de la esposa "no es posible afirmar lo mismo". El escrito de la Fiscalía añade que Laura Hernández, que está casada en régimen de "absoluta separación de bienes con su marido", aparece como titular de la cuentas en la que "se han venido ingresando cantidades de dinero no justificadas de ningún modo".
Descarta cualquier tipo de "falta de conocimiento o capacidad" de la esposa y aporta el hallazgo, durante las diligencias, de una sociedad mercantil -Selama Everest SL- registrada por el ex director siete meses después del despido de su cargo. El objeto social es el asesoramiento en actividades en aeropuertos y el transporte aéreo, de ella López-Santacruz nunca había hablado ante el juez al ser preguntado sobre su patrimonio. Un informe de la Ertzaintza concluyo que esta sociedad "estaría ocultando ingresos" ante la Hacienda foral.
La fiscal señala que la esposa participó en la constitución de esta sociedad y que sustituyó a López-Santacruz en el cargo de administrador. Este reemplazo coincidió en el tiempo con la petición del juzgado de una auditoría de la gestión del ex director.
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