El Whitney y la Tate producen conjuntamente tres proyectos
Los amores virtuales, la batalla de Argel y la gráfica interactiva protagonizan las obras de Golan Levin, Marc Lafia y Andy Deck
No ha sido una moda pasajera como pronosticaban los pájaros de mal agüero. El Whitney de Nueva York, uno de los primeros museos de relevancia mundial en apoyar y preservar el arte vinculado a las nuevas tecnologías y especialmente sus manifestaciones más radicales, como el net.art, no cesa en su empeño y en su última iniciativa ha logrado involucrar nada menos que a la Tate Online, el brazo virtual de Tate Modern, el gigante londinense dirigido por el español Vicente Todolí.
El resultado son tres proyectos realizados por algunos de los artistas más consolidados de la escena internacional, "escogidos con el objetivo de que el net.art tenga el mismo nivel de calidad que las demás obras de la colección", según Christiane Paul, responsable de Artport, el portal del Whitney dedicado exclusivamente al arte digital, abierto desde 2002.
El primer proyecto, The dumpster, lanzado con motivo del día de San Valentín, trata de las vidas amorosas de los adolescentes americanos.
Sus autores, Golan Levin, Kamal Nigam y Jonathan Feinberg, se han pasado meses buceando entre los blogs, los chats y otras interfaces virtuales dedicadas a las relaciones interpersonales, espiando las conversaciones de miles de jóvenes, para plasmarlas posteriormente en una visualización interactiva que permite revivir historias más o menos románticas cuyo común denominador es que han acabado amargamente.
Las herramientas gráficas del proyecto contribuyen a revelar las sorprendentes similitudes y los esquemas de comportamiento globalizados que, a pesar de la diversidad de cada historia de amor, rodean las temidas frases de despedida. De la conquista de la independencia en las relaciones de pareja de The dumpster, a la lucha del pueblo argelino para conseguir la independencia de Francia (que obtuvo en 1965) de The battle of Algiers, de Marc Lafia y Fang Yu Lin.
La obra, que se basa en la película homónima rodada en 1965 por el director italiano Gillo Pontecorvo, reconstruye la estructura piramidal, compuesta de células autónomas y autosuficientes, que supuso el éxito del movimiento nacionalista argelino en su lucha contra los franceses.
Lafia y Lin recrean gráficamente esta estructura, representando las tropas coloniales y los nacionalistas mediante de fragmentos de la película, que se alternan siguiendo reglas preestablecidas.
Cuando células de los dos bandos se encuentran, reaccionan reorganizándose según algoritmos internos del sistema, que desencadenan nuevas secuencias de vídeo, en una perpetua recomposición del metraje original.
El último proyecto, Screening circle, del neoyorquino Andy Deck, se inspira en la centenaria tradición de los quilting circles, los círculos formados por mujeres que se reunían para bordar conjuntamente un mismo tejido, empezando cada una por un lado y avanzando hacia el centro.
El proyecto es una nueva versión multiusuario de las célebres interfaces de edición gráfica características de la obra de Deck, que actualmente está trabajando como docente en la ciudad turca de Izmir.
Screening circle se estructura como un patrón de bordado, pero sin ningún dibujo preestablecido, que los usuarios van bordando mediante una sencilla aplicación compuesta por nueve colores.
El resultado es un collage que se va actualizando en tiempo real y que permite divertidas batallas creativas entre los participantes, que pueden modificar recíprocamente sus creaciones y ver el resultado en su evolución.
ARTPORT WHITNEY: http://artport.whitney.org TATE ONLINE: www.tate.org.uk/netart PROYECTOS: http://artport.whitney.org/commissions/new_commissions.shtml
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