La 'Ruta azul' hace inviable el acceso norte y el tercer carril de la V-21
El Plan de Acción Territorial (PAT) del Litoral, en exposición pública desde el pasado lunes, enterraría dos de los proyectos de infraestructuras planificados en el tramo de costa que separa las ciudades de Valencia y Sagunto. Serían, en concreto, el acceso norte al puerto de Valencia, una vieja aspiración de los empresarios para agilizar el tráfico de mercancías entre las instalaciones portuarias de Valencia y Sagunto, y la ampliación en un tercer carril de la autovía V-21 entre Puçol y Alboraia, un proyecto conjunto del Ministerio de Fomento y de la Generalitat.
Y la explicación a la inconveniencia de ambas infraestructuras está, según se desprende del PAT del litoral, en la recuperación de la Ruta Azul, con el que se pretende crear un gran bulevar turístico-residencial entre la capital valenciana y la del Camp de Morvedre.
Según el PAT, la Ruta Azul obligará al desplazamiento de la autopista V-21 hacia el interior y la creación de un pasillo de infraestructuras por el que discurran agrupadas la citada carretera, el AVE y el ferrocarril convencional. El plan propone además trasladar parte de la actividad comercial del puerto de Valencia a las instalaciones portuarias de Sagunto, lo que haría innecesaria la construcción de un costoso acceso norte.
Pese a todo, el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Rafael Aznar aseguró ayer que el Consell ultima el proyecto de acceso norte. Aznar explicó que se está ultimando la redacción del proyecto cuya licitación se espera para antes del próximo verano. Y sobre los planes de Rafael Blasco para los dos puertos, Aznar dijo que el PAT no supone "nada nuevo bajo el sol" y que tal y como recoge el plan estratégico de la APV Valencia se especializará en contenedores y el crecimiento de las restantes mercancías se desviará a Sagunto.
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