Del césped a la pizarra

El mismo día en que se cumplían 18 años de su debut en un campo de Primera, el ex capitán de la selección argentina Diego Pablo Simeone ha dicho adiós. Fue el viernes pasado. Se ha concedido poco tiempo para los recuerdos. Desde ayer es el nuevo entrenador del Racing de Avellaneda. Un club del que es seguidor desde niño y por el cual ha decidido sacrificar sus últimos meses en activo para enderezar el rumbo del equipo albiceleste.

Rodeado por su familia y el calor tanto de sus seguidores como de los rivales del Estudiantes de La Plata, Simeone dio pistas en su último encuentro de que ya pensaba más como entrenador que como jugador. Se acercó en numerosas ocasiones a sus compañeros para darles instrucciones. El Racing perdió, pero todas las miradas de los aficionados y los directivos están puestas en lo que sucederá el próximo fin de semana ante el Banfield con el Cholo en el banquillo. Sobre él han depositado sus esperanzas tras la marcha de los técnicos Guillermo Rivarola y Fernando Quiroz y la renuncia de Luis Merlo -ex del River, quien dejó el cargo tras un amotinamiento de la plantilla-.

Con este panorama, Fernando Marín, el presidente de la empresa que gestiona al Rácing, cambió de estrategia y tomando como ejemplo lo ocurrido en el Madrid y el Atlético, optó por un técnico de perfil más bajo, pero buen conocedor de la casa.

La decisión de aceptar el puesto por parte del ex capitán de la selección argentina y el hombre que más veces, 106, ha vestido su camiseta, ha provocado la reacción de los aficionados de La Academia. El pasado jueves, Simeone recibía la llamada del ministro de Sanidad, Ginés González, pero la sorpresa vino cuando García, en vez de colgar, le pasó a alguien que tenía al lado y que resultó ser el presidente de la República, Néstor Kirchner, seguidor confeso de Racing. "Me dijo que esté tranquilo, que confía en mis condiciones y que las cosas difíciles cuestan, pero que somos de Racing y estamos acostumbrados", reveló Simeone.

Nacido en la capital argentina en 1970, Simeone debutó en Primera con 17 años en Vélez Sarsfield. Tras un fugaz paso por el Pisa, Carlos Bilardo le fichó con 22 años para el Sevilla. En 1994 llegó al Atlético, en el que se convirtió en un jugador fundamental del cuadro que dos años después consiguió el doblete. En 1997 regresó al calcio, acumulando títulos con el Inter y el Lazio.

Una lesión en 2001 marcó el declive de su carrera y, tras un fugaz paso de nuevo por el equipo rojiblanco, recaló en el club del que era seguidor desde niño: el Racing.