La presidencia de Leocadio Marín culminará la unión del Patronato Comunal Olivarero y la Fundación del Olivar
La Fundación para la promoción del Olivar y la Fundación del Patronato Comunal Olivarero han alcanzado un principio de acuerdo para la fusión de ambas instituciones en un mismo órgano. A falta de cerrar algunos flecos -el acuerdo se formalizará en unos días- ya existe consenso en torno al organigrama del nuevo órgano, cuya presidencia recaerá en el que fuera consejero de la Junta, Leocadio Marín. Natural de Baeza (Jaén), Marín ya ocupó la presidencia de la Diputación de Jaén y fue consejero de Agricultura. Su experiencia en el sector agrario se ha tenido en cuenta a la hora de otorgarle la presidencia de una fundación cuyo principal cometido es impulsar la comercialización del aceite.
Marín ocupará inicialmente la presidencia de Patrimonio Comunal Olivarero, en sustitución de Antonio Luque, presidente de la federación andaluza de cooperativas agrarias, y desde su nuevo cargo afrontará la fusión con la otra fundación.
El organigrama de la nueva fundación contempla también dos vicepresidencias, una de ellas en manos de la Administración (aún por decidir) y otra en manos del sector oleícola. Ésta última parecía reservada inicialmente al sector cooperativo agrupado en Faeca, pero en los últimos días también aspiran a ella los productores, que pretenden hacerla rotatoria a través de las tres organizaciones agrarias más representativas, Asaja, UPA y COAG.
La fusión de las dos fundaciones se anunció en mayo del año pasado, coincidiendo con la celebración de Expoliva, por parte de la Junta de Andalucía (que preside la Fundación del Olivar a través del consejero de Agricultura) y el Ministerio de Agricultura. Sin embargo, el acuerdo se ha demorado por las reticencias mostradas inicialmente por productores y envasadores integrantes del Patrimonio Comunal Olivarero, un órgano creado en la década de los años veinte del pasado siglo. Hace tres años se extinguió y todos sus activos pasaron a una fundación constituida bajo el mandato del anterior ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, y la presidencia de su patronato recayó en Antonio Luque. El consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, uno de los impulsores de esta fusión, lamentó en días pasados que la fusión haya encontrado más trabas e inconvenientes en el olivar jiennense.
Sin embargo, en los últimos días se han acelerado los contactos, se han desbloqueado los principales escollos y Antonio Luque ha aceptado dejar la presidencia ejecutiva tras la fusión. El objetivo que comparten Junta y Ministerio es el de crear un instrumento "más ágil y dinámico" al servicio de los olivareros, con sede en el futuro parque tecnológico del aceite, Geolit, que se construye en Jaén.
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