Venta de carteles contra los porros

La decisión del barrio De Baarsjes, de Amsterdam, de prohibir fumar porros en sus calles -especialmente en una de sus plazas- ha tenido un efecto instantáneo e inesperado. Las señales contra los cigarrillos de hachís han sido robadas varias veces, y la alcaldía local ha decidido ponerlas a la venta. Por 90 euros la pieza, y a través de Internet, cualquiera puede llevarse el curioso mojón que presenta un canuto humeante cruzado por una barra similar a las que impiden fumar tabaco en centros públicos. La argucia ha sido un éxito, sobre todo en el extranjero. En menos de una semana, el consistorio ha recibido cerca de 400 peticiones de compra, la mitad fechadas en Estados Unidos. Desde Australia y Singapur han llegado también numerosas solicitudes. La decisión de De Baarsjes, un distrito con abundante inmigración y problemas de convivencia, no se hará extensiva al resto de la capital holandesa. De momento, el alcalde de la ciudad, el socialdemócrata Job Cohen, no piensa modificar las normas actuales que permiten fumar marihuana al aire libre. También puede hacerse en los cafés especializados, siempre que no se perturbe la paz ciudadana. Lo que sí habían hecho otras alcaldías locales, también con roces cívicos, era prohibir el alcohol en la calle. Un experimento probado ya en otras zonas urbanas.-