Todos los caminos conducen a...
Acabo de leer un artículo publicado en su edición del sábado 7 de enero de 2006, (página 3 del suplemento de Andalucía). El artículo en cuestión ocupa algo más de media página y se titula Todos los caminos conducen a Jerez. No sé si el periodista-corresponsal que lo escribe al elegir el titular se ha visto influenciado por los espléndidos contenidos que una serie histórica, Roma, está actualmente emitiendo en la cadena Cuatro de televisión, pero lo cierto es que el primer mensaje que le puede venir a la mente a una persona con unos mínimos conocimientos de Historia es algo así como que "... todos los caminos conducen a Roma..." Hasta ahí bien, pero la lectura del consabido artículo llega a "tropezar" con la siguiente frase... (o sentencia), "La capital de la provincia es Cádiz, pero por esta ciudad no se pasa: hay que ir...".
Estimados señores, tampoco es para tanto. Es comprensible (¿o entendible?) que por razones geográficas nuestra ciudad no sea el pivote de una sofisticada red viaria, pero lo cierto es que aunque por nuestra ciudad no haya obligatoriamente que pasar, recompensa con creces visitarla como destino final, y mejor aún, en ocasiones "tranquilas" ajenas a festejos conocidos y difundidos. Son casi 3.500 años de asentamiento de una población, con familias que en origen, hace muchos años, procedemos de diferentes lugares del continente, y que dispone de una buena oferta histórico-cultural. No hay que olvidar que en otras cosas, fue cuna de la prensa liberal actual. Y, sobre todo, que a pesar de que desde el reinado del no muy deseable rey Fernando VII "el deseado", hemos estado bastante olvidados en muchos aspectos, hemos intentado, y creo que logrado, mantener una tradición de tolerancia libre-pensadora que ha hecho y hace, bastante agradable visitarnos y contactarnos... aunque sea sólo como un destino de "punto final".
