La FIFA suspende la fiesta
El Mundial de Alemania no tendrá ceremonia inaugural por los problemas que puede ocasionar en el césped del Olímpico de Berlín
Después del escándalo de la inseguridad de los estadios del Mundial, la FIFA sorprendió ayer con otra medida de difícil explicación. La federación internacional suspendió la gala de inauguración del Mundial de fútbol, que se celebra en junio de este año en Alemania. Estaba previsto que la gala se celebrara en el Estadio Olímpico de Berlín el 7 de junio, dos días antes de que se dispute el partido inaugural (Alemania-Costa Rica) en Múnich. No se celebrará.
Según la versión oficial, no hay tiempo suficiente entre la gala y el entrenamiento de la selección de Brasil, el día 12, para desmontar el escenario y desplegar un nuevo césped. El día 13 se disputará el primer partido en el Olímpico de Berlín, el Brasil-Croacia. Sin embargo, el diario local Berliner Zeitung adelantaba ayer una información que publica en su edición de hoy que asegura que el cesped es sólo uno de los motivos de la cancelación. Según atribuye a fuentes de la FIFA, la organización del evento cada vez era más cara. El presupuesto inicial era de 25 millones de euros. Además, su director artístico, el austríaco André Heller, no convenció a los responsables de la FIFA al presentarles la gala el pasado jueves.
Por lo demás, las entradas, a un precio entre 100 y 750 euros, no se estaban vendiendo bien, añade el diario alemán. "Para mí, no hubiese sido ningún problema desplegar el césped a tiempo. Si empezamos a las cinco de la mañana, a las diez hemos terminado", declaró al portal de noticias Spiegel Online John Hendriks, director de la empresa holandesa Hendriks Graszoden, encargada de plantar el césped. "La FIFA ha asegurado que cumplirá los contratos", aseguró ayer Heller, el maestro de ceremonias. "Barato no les va a salir. Al fin y al cabo, llevamos dos años trabajando", añadió.
A todo esto, la ciudad de Múnich ya se ha ofrecido para albergar la gala. Pero Heller descarta esa posibilidad. "El show está pensado, técnicamente y en cuanto a contenido, para el escenario del estadio olímpico y trata su historia de manera crítica. El escenario está construido de acuerdo con la arquitectura del estadio, nuestros voluntarios, parte central del show, son de Berlín y alrededores", explicó el artista.
Heller contaba para el evento, de 90 minutos de duración, con la participación de 6.500 voluntarios y 132 campeones mundiales de fútbol, entre ellos Maradona y Pelé. En la gala hubiesen actuado, además, la soprano Jessye Norman, el grupo de hip-hop Black Eyed Peas y el cantante argelino Cheb Khaled. La música corría a cargo de Peter Gabriel y Brian Eno, y la dirección, del coreógrafo francés Philippe Decouflé. "Sobre todo lo lamento porque a estas alturas ya se veía claramente el extraordinario resultado, el alto nivel artístico del trabajo de Philippe Decouflé, Peter Gabriel, Brian Eno y del responsable del escenario, Mark Fischer", explica Heller. Esta iba a ser la primera vez que un Mundial de fútbol se inaugurara con una gala, en vez de con un partido. Pero la FIFA ha optado por cancelar la fiesta.
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