Pérez Boada invoca la nueva estrategia del IVF y una incapacidad parcial para despedir al jefe de inversiones

Enrique Pérez Boada, director del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), invocó ayer la carga de trabajo que llevará aparejado el nuevo plan estratégico de la entidad, "que prevé ampliar mucho la oferta de productos y servicios a empresas", y una incapacidad laboral parcial, "una sordera muy importante", como causas del despido improcedente de Enrique Benedé, director de inversiones del IVF desde su fundación. Pérez Boada explicó que el plan estratégico de la entidad para los próximos cuatro años "incluye una reorganización de áreas y departamentos" y una mayor vocación "comercial" para ampliar la oferta de productos como "fondos de capital riesgo o créditos participativos para empresas". Según el director del IVF, Benedé, de 60 años, "no se acopla" a los nuevos tiempos.

El responsable de inversiones se ocupaba de todos los créditos a empresas. Benedé fue fichado en su día para aportar a la entidad pública la experiencia comercial que adquirió al servicio del desaparecido Banco de Crédito Industrial en Castellón, que acabó integrado en Argentaria.

Pérez Boada afirma que sugirió al director de inversiones la posibilidad de anticipar su jubilación antes que "vaciar" sus competencias y que la figura del despido improcedente se pactó, "como en cualquier empresa privada", porque resulta la más favorable para el despedido.

El director del IVF, que asumió el despido en virtud de las competencias que tiene asignado su cargo, tiene previsto informar al consejo sobre la cuestión en la próxima reunión y apuntó que "lo normal es promocionar a alguien de la propia plantilla del instituto" para ocupar el puesto de Benedé.

El plan estratégico del IVF también persigue "una estructura equilibrada de costes e ingresos". Pero el despido improcedente de uno de los primeros empleados de la entidad supondrá un quebranto notable para una empresa que tuvo unos beneficios de 90.000 euros en 2004.

La portavoz socialista de Hacienda, Cristina Moreno, se apresuró a solicitar ayer la comparecencia de Gerardo Camps, consejero de Hacienda y presidente del IVF, para "explicar las causas del despido improcedente de un alto cargo" de la entidad y el coste de la misma. "Cuando venga, sabremos quién ocupa el sitio de Benedé y qué está haciendo", comentó Moreno, "también habrá que ver por qué el despido está tan bien pagado".