El homicida de Correos se enfrentó a sus compañeros porque quería librar los fines de semana

Manuel Ramírez Torrecilla, el ex vigilante de seguridad que el lunes pasado mató a tiros a dos de sus antiguos compañeros de la sede central de Correos en Madrid y luego se suicidó, se enfrentó en varias ocasiones con sus compañeros porque quería librar los fines de semana para poder irse de caza a La Adrada (Ávila).

Ramírez Torrecilla, de 35 años, comenzó a trabajar en Orma Seguridad el pasado 19 de noviembre, pero firmó su baja voluntaria el 27 de diciembre. Previamente los inspectores de la empresa habían emitido un informe en el que pedían la retirada de Ramírez del servicio por considerarle un individuo conflictivo y manifestar una "falta clara de deontología profesional". Detrás de su comportamiento, según señalaron vecinos del homicida en La Adrada y algunos ex compañeros de trabajo, estaba la obsesión que tenía Ramírez por la caza.

"Él sólo quería cazar y quería librar los fines de semana para poder venir a La Adrada", explicó un vecino del homicida. Pero en el cuadrante de turnos a Ramírez, que había ganado algún trofeo como cazador, le solía tocar trabajar por las noches, los fines se semana y los festivos, según algunos de sus ex compañeros. El viernes pasado fue la última vez que Ramírez salió de caza, en una zona cercana a La Adrada. Cazó zorzal, liebre y paloma torcaz.