Condena de nueve años para un miembro de Los Ñeta por apuñalar a un joven

La Audiencia de Madrid ha elevado a nueve años, el máximo que permite la ley, la pena que reclamaba la fiscalía, siete años, para un procesado por intento de homicidio. Le ha elevado la pena por la mala conducta del acusado. El tribunal ha tenido en consideración "el reproche penal que merece la conducta desplegada" por el condenado, un miembro de la banda de Los Ñeta.

Los hechos ocurrieron el 26 de marzo de 2004 en la localidad madrileña de Majadahonda, cuando Néstor Andrés Ospina Viveros, colombiano de 23 años y perteneciente a la banda juvenil conocida como Los Ñeta, apuñaló a Vicente Enrique Zúñiga Campos cerca del pulmón izquierdo.

El agredido, huyendo de las agresiones y patadas de Néstor Andrés y otros componentes de la banda juvenil, subió a un autobús. Allí fue arrinconado. "Ven aquí que te voy a matar", gritó Néstor Andrés, conocido en su banda como El Rojo. Y le dio una puñalada "con la intención de acabar con la vida de Vicente", explica la sentencia. Cuatro testigos vieron bajar a El Rojo con el cuchillo en la mano y manchado de sangre.

Durante el juicio, el acusado negó todas las acusaciones. Además, llegó a amenazar a los testigos, lo que obligó a suspender la primera vista oficial del juicio. Los testigos tuvieron que declarar mediante protección visual y con la voz distorsionada. Las explicaciones del acusado "son tan pueriles y con falta de fundamento, que no merecen ningún crédito", asegura el tribunal. Con ellas puso de manifiesto "el cinismo mostrado por el acusado desde que pasó a disposición judicial".

La sentencia explica que el imputado negó desde su primera declaración que fuera él quien asestara la puñalada que lesionó a Vicente, pero el tribunal matiza que la prueba testifical ha sido "lo suficientemente contundente y reiterativa como para no dejar dudas de la autoría material y directa del acusado".

Asimismo, la sala expone que a pesar de que el fiscal solicitara la pena de siete años de prisión, el tribunal le impone nueve debido a la "vileza de su acción".