UGT ofrece sus medios al fiscal para investigar accidentes laborales

"El primer día del año un trabajador murió en un accidente laboral". Rafael Recuenco, secretario general de UGT del País Valenciano, "constató" ayer la vigencia del drama de la siniestralidad y anunció la decidida voluntad de la ejecutiva del sindicato de poner coto a un problema que se acentúa en paralelo a la falta de presión inspectora. UGT busca un acuerdo con el fiscal para contribuir a esclarecer futuros accidentes y aportar, con valor jurídico, antecedentes o detalles en torno a cada caso.

Carlos Calero, secretario de Salud Laboral, explicó que representantes de UGT mantienen reuniones con el fiscal para establecer "un marco estable" de cooperación para "poner a disposición de la fiscalía todos los antecedentes que obren en nuestro poder o nuestros medios" para intentar paliar la escasez de medios judiciales para afrontar "investigaciones complejas" como resultado de cada accidente. Calero agradeció "la receptividad de la fiscalía" ante la oferta de cooperación de UGT y sugirió que sólo la "tolerancia" ante los accidentes laborales explica su persistencia. El objetivo final es "que se condene con toda rotundidad a las empresas dolosas", explicó Calero.

El número de trabajadores muertos en accidente laboral a lo largo de 2005 creció "como mínimo un 18%", según estimaciones de UGT, pero Calero reclamó prudencia ante la falta de datos oficiales "que suelen retrasarse cuando son malos". El alza de accidentes laborales con resultado de muerte contrasta con la ligera reducción registrada en 2004, en paralelo a una ambiciosa campaña administrativa para extender hábitos de prevención y salud laboral entre trabajadores y empresarios.

El segundo día del año se cerró con tres heridos en accidentes laborales. El tercero con la difusión de los datos de empleo que arrojan un alza del 5,5% del número de parados registrados en la Comunidad Valenciana a lo largo de 2005.

Recuenco negó que el alza del paro, sobre todo en la provincia de Alicante, sea achacable a la elevada inmigración. El secretario general de UGT denunció la "autocomplacencia" de la Generalitat ante los problemas que sufren "las comarcas del interior, como el Vinalopó" y apuntó, como origen del problema, a que "los empresarios que han ganado mucho dinero no han puesto sus beneficios al servicio de sus empresas para generar empleo". UGT convocará movilizaciones en el Vinalopó para llamar la atención sobre los problemas del sector del calzado e instará la labor del Observatorio de la Industria, un órgano que pretende poner en común las iniciativas posibles para combatir la destrucción de empleo.

Recuenco también avanzó que UGT intentará trasladar a la Administración autonómica y a la mayoría de convenios colectivos los contenidos de la ley de conciliación de la vida familiar y laboral pactada por el Gobierno para los trabajadores de la Administración General del Estado.

Recuenco evitó detalles sobre una sentencia que condena a UGT a devolver 1,3 millones de euros que el sindicato gestionó para cursos de formación en 1993. "Las sentencias no se comentan, se acatan".