_
_
_
_

Un hombre muere desangrado tras ser apuñalado en una reyerta en Joy Eslava

La policía detiene al supuesto autor de la cuchillada y busca a otros dos cómplices

F. Javier Barroso

La noche de diversión se tiñó de sangre ayer de madrugada. Un vecino de Carabanchel, Roberto García Grimaldo, de 24 años, murió después de que se desencadenara una reyerta multitudinaria en el interior de la discoteca Joy Eslava, en el distrito de Centro. La víctima recibió una puñalada en la ingle derecha que le seccionó la arteria femoral, lo que hizo que se desangrara en minutos. Los agentes de Homicidios han detenido a Anas W., de 22 años, como supuesto autor de la mortal cuchillada. Los investigadores han identificado a los dos cómplices que acompañaban al arrestado.

Roberto García había acudido junto con uno de sus tres hermanos a la discoteca Joy Eslava, en el número 11 de la calle del Arenal (Centro). Habían ido a celebrar el cumpleaños de una de las amigas del grupo. Hasta las cuatro de la madrugada, la velada había transcurrido tranquila, entre risas y copas. Los problemas llegaron sobre las 3.50, según fuentes policiales.

A esa hora, uno de los clientes de la discoteca empezó a meterse con una chica que acompañaba a Roberto García. La joven, molesta porque le estaba incomodando, se lo dijo a sus amigos tras repetirle en numerosas ocasiones que le dejara en paz. De las palabras pasaron a las manos. En cuestión de segundos se montó una enorme riña tumultuaria en la que había dos grupos bien diferenciados de unos 20 miembros cada uno. Hubo lanzamiento de botellas y de vasos por doquier, acompañado de golpes y puñetazos.

Un hermano del fallecido, Antonio, de 21 años, recibió un botellazo en la parte derecha de la cabeza que le produjo levantamiento del cuero cabelludo. Ese golpe le dejó inconsciente y cayó al suelo. Cuando logró recuperarse de la agresión vio a su hermano Roberto caído en el suelo. "Ha sido un golpe muy duro, porque, en cuanto se ha levantado a ver qué le pasaba, se le ha muerto", señaló Juan Carlos López, un cuñado de la víctima.

Por la espalda

Muchos de los clientes salieron despavoridos del local al percatarse de la batalla campal. Roberto García estaba sentado en la barra del fondo del local, charlando con uno de los camareros, ya que hace unos tres años él había trabajado en Joy Eslava, según su cuñado. "Todo ha debido de ser muy rápido. Lo que le han dicho los testigos a la policía es que la puñalada se la dieron por detrás, sin que se diera cuenta ni pudiera defenderse", añadió López.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Un médico y una enfermera que se encontraban en la sala intentaron reanimar a la víctima hasta que llegaron los facultativos de una UVI móvil del Samur-Protección Civil, además del jefe de guardia y del personal de apoyo que estaba de servicio, según un portavoz de Emergencias Madrid. Cuando llegaron los médicos de este servicio municipal de ambulancias comenzaron las maniobras de reanimación cardiopulmonar durante más de media hora. Todo resultó inútil. García había recibido una puñalada baja en la parte derecha del abdomen que le entró a la altura de la ingle y le seccionó la arteria femoral. "Es una puñalada similar a la cornada de un toro, como la que mató a Paquirri en Pozoblanco en 1984", explicó un miembro del Samur.

La víctima quedó tendida en medio de un gran charco de sangre, en la pista de baile, donde se acumulaban miles de pequeños cristales. Era el resultado palpable de la enorme trifulca que se vivió en la discoteca Joy Eslava en cuestión de minutos.

Antonio, el hermano del fallecido, tuvo que ser asistido de una crisis de nervios por los psicólogos del Samur que se desplazaron al lugar. Precisamente fueron éstos los que avisaron a la hermana del fallecido, que vive en Collado Mediano. "Es una familia que está muy unida. Por eso, Antonio ha preferido que avisaran a mi esposa para que fuera ésta la que avisara a sus padres", comentó Juan Carlos López.

Al lugar acudieron más de 60 policías entre agentes de la comisaría de Centro, de la Brigada de Seguridad Ciudadana y del Grupo X de Homicidios. El supuesto autor material de las puñaladas, Anas W., de 22 años, fue detenido por los investigadores dentro de la discoteca. A éste le constan 15 antecedentes en los archivos del Cuerpo Nacional de Policía en los últimos años, según fuentes del caso. Los arrestos han sido por robo con violencia e intimidación (atraco), lesiones, atentado contra agente de la autoridad, hurto e infracciones a la Ley de Extranjería.

El detenido fue atendido en un centro hospitalario de las diversas magulladuras y golpes que también recibió durante la trifulca. A las 10.30 fue trasladado al grupo de Homicidios a la espera de ser interrogado por los investigadores en presencia de su abogado.

Los numerosos testigos que presenciaron la trifulca lograron identificar a los otros dos compinches del detenido. Anoche estaban en busca y captura y, según fuentes policiales, pueden ser detenidos en las próximas horas, ya que se mueven por la zona de Centro. También han sido detenidos en anteriores ocasiones.

Los agentes de la Brigada de Policía Científica registraron, junto con los de Homicidios, el local y hallaron en su interior el arma utilizada en el crimen. Aún tenía restos de sangre, según fuentes del caso. Fue remitida a los laboratorios policiales para ser analizada en busca de huellas del homicida.

Un portavoz de Emergencias Madrid explicó que otras dos personas resultaron heridas de carácter leve en la trifulca. Se trataba de un empleado de Joy Eslava y un cliente. Ambos sufrían golpes y magulladuras.

El local estará tres días clausurado

El juez que instruye el caso por el homicidio de Roberto García Grimaldo decretó ayer el cierre de la discoteca Joy Eslava durante tres días. Será el tiempo en el que los especialistas de Policía Científica hagan un detallado estudio del interior del local y de todas las circunstancias que han rodeado esta muerte violenta, que representa la número 56 desde que comenzó el año.

Fuentes policiales señalaron ayer que el tiempo concedido por el magistrado resulta insuficiente ya que son muchos los detalles que tienen que analizar en una zona de la discoteca tan repleta de gente como cuando ocurrió el homicidio.

Las citadas fuentes rechazaron que el homicidio se produjera realmente por un problema de que un grupo de jóvenes se metiera con una de las chicas que acompañaban al fallecido. Las primeras pesquisas apuntan a que detrás de la muerte violenta podría haber un asunto de tráfico de drogas.

La policía también evitó que el detenido, Anas W., de 22 años, fuera molido a palos, ya que cuando llegaron los agentes había un grupo linchándole, según fuentes del caso. De hecho, tuvo que ser atendido de numerosos golpes y magulladuras que presentaba por la agresión que sufrió tras, supuestamente, apuñalar al vecino de Carabanchel.

La familia de Roberto García Grimaldo se encontraba ayer destrozada. La muerte de uno de los cuatro hermanos en unas fechas tan señaladas como las navidades. El fallecido trabajaba como agente inmobiliario en una franquicia de la empresa Tecnocasa, sita en la calle de Juan Pantoja, número 8, en el distrito de Tetuán. "Era una persona extraordinaria, muy sensato, que nunca se metía en problemas", comentó Juan Carlos López, el cuñado del fallecido. "Hacía poco que se había comprado un coche [un BMW] y estaba muy ilusionado porque quería adquirir un piso", añadió su familiar.

Roberto García vivía con sus padres en la calle del Papagayo, en Carabanchel. Estaba soltero y no tenía novia, según su familia. Había pasado todas las fiestas con sus allegados. Era una persona corpulenta, de 1,75 de estatura, con el pelo rapado y con un tatuaje de una calavera en uno de los brazos. Su cuerpo estaba siendo velado anoche en la sala 17 del tanatorio de San Isidro. Será incinerado hoy a las 15.20 en el cementerio de la Almudena.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_