El dilema de Nihat
La Real intenta vender al turco a algún equipo ruso y el jugador desea quedar libre en junio
Nihat salió de Anoeta en el minuto 90 del partido contra el Cádiz entre unos tímidos aplausos. Ni una pancarta de ánimo, ni un gesto de la grada, sólo una ovación como la que cualquier público agradecido puede dedicar a un futbolista que ha dado todo durante un encuentro. Pero no era sólo eso. Nihat, el turco que hizo grande a la Real Sociedad junto a Kovacevic, pudo disputar sus últimos minutos como jugador del club donostiarra el pasado miércoles.
La Real, que atraviesa por una delicadísima situación económica, ve cómo uno de sus principales activos quedará libre el próximo mes de junio. Nihat lo sabe y, como además de querer mejorar su contrato quiere al club que le ha hecho crecer, está dispuesto a salir del equipo para que éste se embolse una cifra cercana a los tres millones de euros. El Dínamo de Moscú ya ha lanzado una oferta firme al consejo presidido por Miguel Fuentes. El Spartak lleva tiempo detrás del jugador aunque aún no ha mostrado sus cartas, cuando quedan pocos días para la apertura del mercado de invierno. "Es verdad que existe interés por parte de dos equipos, pero habrá que esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Para llegar a un acuerdo, éste debe ser positivo para la Real, el futbolista y el club de destino", aseguró Fuentes al final del choque contra el Cádiz
Nihat, la estrella de un equipo en el que ha marcado 56 goles a lo largo de casi cinco temporadas, ahora es un jugador más, al que no se venera como hace sólo unos meses. El culebrón de su traspaso ha enfriado el ánimo de San Sebastián. En la recta final de la pasada temporada, el turco sufrió una grave lesión de rodilla cuando otro equipo moscovita, el CSKA, ya había puesto sobre la mesa un talón de 10 millones de euros. La operación se paralizó y la Real aseguró que el delantero seguiría en el equipo. Nihat, tentado por cifras astronómicas, negociaba con un conjunto lastrado por las deudas. Pero la renovación resultó imposible. Desde entonces, se critica que Nihat juegue con desidia o que no se involucre en el equipo, lo que él desmiente con partidos brillantes y con goles. Pero nadie quiere olvidar. Y eso pesa sobre el ánimo de Nihat, que desea salir con nobleza de San Sebastián. A la espera de que termine su contrato (la Real asegura que "está obligada a escuchar ofertas"), el club vive inmerso entre pequeñas alegrías y sombras en ciernes.
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