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La policía detiene a 25 extranjeros en una redada en Valdemingómez

Los detenidos se dedican a los robos al descuido y a la mendicidad con niños

F. Javier Barroso

Apenas había amanecido cuando un nutrido grupo de policías municipales y nacionales entraron en un asentamiento ilegal de la Cañada Real Galiana, en Valdemingómez. Los agentes detuvieron a 29 adultos de origen rumano, de los que cuatro quedaron en libertad. Al resto les fueron incoados los correspondientes expedientes de expulsión del país. Los 22 menores de edad que residían con ellos fueron internados en centros de primera acogida de la Comunidad de Madrid. Los policías creen que los detenidos se dedicaban a la mendicidad y a robar por el método del descuido mientras limpiaban parabrisas de coches en los semáforos o a mendigar en estos puntos.

El dispositivo policial comenzó sobre las 7.30 en la Cañada Real Galiana, en el distrito de Villa de Vallecas. Los agentes de la Jefatura Superior de Policía montaron tres dispositivos de vigilancia durante cerca de media hora para controlar los vehículos que se mueven por esta zona tan concurrida en la que se trafica con efectos robados y en la que se trapichea con estupefacientes. Esta operación se saldó con dos detenidos, según fuentes policiales.Cuando los agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana, en especial los de la unidad nocturna denominada Centauros, consideraron que la situación estaba controlada, se internaron en un solar copado por infraviviendas, en el número 102 de la Cañada Real. Allí se agrupan una docena de chabolas construidas con tablones y puertas viejas. Las cubren telas viejas. La basura se reparte por doquier.

Los agentes, con un inspector jefe a la cabeza, entraron en este poblado, sin que los residentes opusieran resistencia o mostraran su enfado. Los policías separaron a los hombres de las mujeres y los niños.

Los 29 adultos fueron detenidos y conducidos a dependencias policiales. Todos, excepto cuatro, carecían de documentación que les permitiera residir legalmente en España. A todos ellos se les incoaron los correspondientes expedientes de expulsión.

Los investigadores no descartan que, una vez identificados plenamente, algunos puedan ser acusados de robos y hurtos, ya que muchos de estos rumanos se dedican a mendigar y a limpiar los parabrisas en distintos puntos de la ciudad. Eso sí, aprovechan el descuido de los conductores para abrir las puertas y robar todos los objetos de valor que lleven en su interior, como teléfonos móviles o bolsos. También suelen abrir los maleteros. Los agentes tampoco descartan que tengan causas pendientes en los juzgados de plaza de Castilla.

Primero, los adultos

Los primeros en ser trasladados por la policía fueron los adultos. Para ello se necesitaron varias dotaciones policiales, ya que el furgón de detenidos previsto se quedó pequeño. Después, les tocó el turno a las mujeres.

Para evitar problemas con los menores, el Ayuntamiento desplazó a técnicos del Samur Social, que se encargó de cuidar a las criaturas hasta que fueron internadas en centros de primera acogida de la Comunidad de Madrid. Muchos de ellos se quedaron llorando al ver cómo eran separados de sus madres. Algunos estaban somnolientos, otros, con cara de no entender nada de lo que estaba ocurriendo, miraban asustados a los agentes.

Otra forma que tienen de ganarse la vida es mendigar con los niños en las zonas comerciales más frecuentadas, sobre todo, del centro de la capital. Recientemente, la Policía Municipal y el Cuerpo Nacional de Policía hicieron una operación similar que terminó el 2 de noviembre pasado con la detención de 46 personas, de las que 24 eran menores de edad dedicados a la mendicidad. Además, la Policía Municipal recogió el 2 de diciembre a 15 menores de nacionalidad rumana que ejercían la mendicidad en zonas comerciales de los distritos de Tetuán, Arganzuela, Salamanca y Centro. Los menores tenían edades de entre los tres meses y los 14 años. Una de las chicas estaba embarazada.

Entre los detenidos en la operación de ayer se encontraba una joven de 17 años con dos hijos que, supuestamente, se dedicaba a la mendicidad.

Según fuentes policiales, 19 de los 22 menores tienen menos de 13 años, mientras que los restantes superan esa edad. Los primeros fueron al centro Santa Eugenia, mientras que los segundos permanecen en Valdetorres del Jarama. El operativo estuvo formado por unos 30 agentes del Cuerpo Nacional de Policía, perteneciente a las brigadas de Seguridad Ciudadana y Extranjería y de la comisaría de Villa de Vallecas. La Policía Municipal desplazó a ocho policías agentes-tutores y otros tantos de la unidad de Villa de Vallecas.

El Samur-Protección Civil envió al lugar una UVI móvil para atender a tres miembros de una familia que sufría tuberculosis. Los agentes fueron protegidos en todo momento con guantes y mascarillas para evitar el contagio de ésta u otras enfermedades.

Los agentes también estaban pendientes de comprobar si los cinco coches que tenían aparcados en el solar tenían toda la documentación en regla. Al lugar se desplazaron grúas municipales para llevárselos a los depósitos en caso de que incumplieran la ley.

Fuentes policiales señalaron que en la última ocasión que se produjo una operación de estas características en la Cañada Real, la del pasado 2 de noviembre, terminó con la expulsión de 14 inmigrantes rumanos que carecían de permiso de residencia.

Dos policías municipales (a la derecha) piden la documentación a las mujeres, rodeadas de niños, durante la redada en la Cañada Real Galiana.
Dos policías municipales (a la derecha) piden la documentación a las mujeres, rodeadas de niños, durante la redada en la Cañada Real Galiana.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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