La patronal CEOE abre el proceso electoral en medio de recriminaciones mutuas entre Cuevas y Rosell

La tensión entre José María Cuevas, que opta a su séptimo mandato al frente de la CEOE, y el empresario Juan Rosell, aspirante a relevarle en la presidencia, estalló ayer en el comité ejecutivo de la patronal que abrió el próximo proceso electoral, que culminará en febrero.

"Ha sido un rifirrafe tenso, casi violento, con recriminaciones recíprocas", señalaron fuentes conocedoras de la reunión.

El detonante del cruce de acusaciones entre Cuevas y Rosell fueron las declaraciones de uno y otro en las últimas semanas: Cuevas, sobre la renovación de la CEOE, el mensaje que viene martilleando el presidente de la patronal catalana Fomento del Trabajo; y Rosell, sobre el malestar del empresariado catalán para con los empresarios del resto de España porque no han mostrado su solidaridad frente a los ataques que reciben las empresas y los productos originarios de Cataluña.

El empresario catalán encajó mal que Cuevas diera a entender en una entrevista que la ejecutiva de la patronal española llegó a conocer la propuesta para renovar la CEOE que Cuevas había encargado al catalán. Rosell, que sostiene que su propuesta quedó en un cajón, ha enviado ahora una carta de unos pocos folios explicando sus "ideas sobre las posibilidades de cambio de la patronal" a los miembros del comité ejecutivo, un gesto que "no ha gustado a Cuevas", según fuentes empresariales.

Cuevas, por su parte, echó en cara a Rosell que haya expresado la "soledad y falta de solidaridad" que siente el empresariado catalán, frase que fue interpretada como un dardo a la CEOE. Según fuentes próximas a Cuevas, "Rosell replicó que sus declaraciones han sido malinterpretadas y Cuevas le ha pedido una aclaración". Un empresario andaluz sugirió que la patronal hiciera una declaración de apoyo a las empresas catalanas, iniciativa que quedó en el aire.

Rosell no oficializó ayer su candidatura. Puede hacerlo hasta 7 días antes de las elecciones, que se celebrarán en febrero. La fecha la decidirá la junta del 18 de enero. También se convocará una convención sobre la competitividad que presidirán el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.