Eriksson, contra Suecia de nuevo
Sven Goran Eriksson, el seleccionador de Inglaterra, se volverá a cruzar por segundo Mundial consecutivo con Suecia, el país donde nació. En el de Japón y Corea, en 2002, ambas selecciones empataron a un gol. Según Eriksson, fue cosa del "destino".
- Angola debuta frente a Portugal. La selección africana, que nunca ha disputado ningún Campeonato del Mundo, debuta contra su antigua metrópoli: Portugal. Los angoleños consiguieron la independencia en 1975.
- Beckham, contento de reencontrarse con Yorke. El centrocampista ingles del Madrid David Beckham celebró ayer que el sorteo deparase un enfrentamiento entre su selección y Trinidad Tobago, donde podrá reencontrarse con su ex compañero en el Manchester United Dwight Yorke.
- Parreira no cita a España. Uno de los personajes más solicitados ayer era el seleccionador brasileño, Carlos Alberto Parreira, que afirmó que habrá una lucha de 14 selecciones europeas contra dos suramericanas, Brasil y Argentina. Mencionó a Francia, Alemania, Inglaterra, Holanda y Portugal. A España ni la mentó.
- Detlef Lange, el olvidado niño de la suerte. El sorteo sirvió para sacar del baúl de los recuerdos a Detlef Lange, quien, a sus 11 años, tuvo su cuarto de hora de gloria hace ahora algo más de tres decenios. En el del anterior Mundial alemán, el de 1974, fue, en Francfort, la mano inocente que dio la fortuna a su país, que se proclamó campeón. Un clamor recorrió la sala cuando sacó en el mismo grupo a las dos Alemanias, la occidental y la oriental que se enfrentaron por vez primera sobre el césped: la RDA ganó por 0-1 a la RFA. Tras la efímera gloria, probó en el mundo del espectáculo. Sin éxito. Ahora trabaja de guarda en una tienda de materiales de construcción.
- Merkel se rinde ante el 'futbolista' Schröder. La Federación Alemana (DFB) nombró ayer socio de honor al ex canciller alemán, el socialdemócrata Gerhard Schröder, de 61 años. Su presidente, Theo Zwanziger, lo calificó de "futbolero de pura cepa". En sus años mozos, Schröder jugó al fútbol y, por su entrega sobre la pradera, se ganó el mote de El Currante. "El fútbol siempre fue para mí una oportunidad de conseguir reconocimiento", dijo ayer con una sonrisa. También acudió a la reunión su sucesora, la democristiana Angela Merkel, de 51 años, que alabó el trabajo de la DFB y la animó a organizar en 2011 el Mundial femenino. En un arranque de sinceridad, se dirigió a su antecesor Schröder y reconoció: "Nos hemos medido en muchos terrenos, pero en el fútbol nunca lo haría".
