"Hay que atajar la violencia juvenil de manera radical"
José María Deira (San Fernando, 58 años) dirige la comisaría de Cádiz desde hace año y medio y ha alertado en reiteradas ocasiones sobre la creciente violencia juvenil. Achaca este "preocupante" fenómeno a la pérdida de valores, a leyes poco contundentes y a la dejación de responsabilidades educativas de los padres.
Pregunta. ¿Cuenta con personal y medios suficientes?
Respuesta. Me gustaría y sería conveniente tener más medios humanos y materiales, pero con lo que tenemos estamos haciendo un papel muy digno. Estamos cumpliendo con todos los objetivos marcados.
P. ¿Cómo responde la policía a la conflictividad laboral?
R. Ahora mismo, hay una tregua, aunque hay algunos indicativos que nos hacen pensar que algunas empresas pujantes de la zona van a tener conflictividad. Esperemos que no sean como las del año pasado por la reconversión naval. En el puente Carranza, en San Fernando y en la propia ciudad de Cádiz, hemos tenido problemas importantes.
"Hay un sector de la juventud que tiene como objetivo poner a prueba sus sentidos"
P. ¿Cómo se explica a un ciudadano el corte del puente Carranza?
R. No se le puede explicar y, si se le explica, no lo va a entender. Los derechos de manifestarse de unos no pueden interceptar los derechos de circulación de otras personas, que a lo mejor tienen absoluta necesidad de desplazamiento. Hubo un caso en el que tuvimos cortado los dos accesos para entrar en Cádiz. Fue poco tiempo, pero lo suficiente para provocar un trastorno inmenso. La inmensa mayoría de los ciudadanos cogen unos rebotes monumentales.
P. ¿No debe ser fácil dar la orden de disolver?
R. Casi nunca la hemos dado. Hemos contenido la manifestación para evitar daños mayores en las instalaciones del puente. Sólo hemos repelido las agresiones para ver si, por agotamiento, ganábamos la partida.
P. ¿Qué le sugiere el fenómeno del botellón?
R. Me sugieren muchas cosas, casi todas preocupantes. La mayoría de los jóvenes se reúnen en el botellón o la movida con un único afán de diversión sin dañar ni molestar a nadie. Es una muestra del grado de socialización de los jóvenes. Sería recomendable otra hora para la diversión, pero su forma de divertirse en distinta a la que teníamos nosotros cuando éramos jóvenes. Pero hay un sector de la juventud que tiene como objetivo poner a prueba sus sentidos: embotarse con el alcohol y las drogas y tratar que la noche no acabe nunca. Estos jóvenes tienen otros parámetros de conducta y pueden llegar a desfogar todos sus instintos más primitivos. Entonces aflora la violencia, los malos modales y nos encontramos con una situación complicada. Venimos denotando una creciente violencia en las relaciones de estos jóvenes, cada vez con menos edad, con otros jóvenes, con el resto de la sociedad y la policía.
P. ¿Qué falla?
R. Me sorprende la dejación de padres y educadores de esos chicos que, con 12 o 13 años, les permiten estar en ambientes francamente promiscuos, peligrosos y que no contribuyen a la educación de la persona. Están hasta las tres, cuatro o cinco de la mañana sin ningún tipo de control.
P. ¿Cree que hay pérdida de valores en la juventud?
R. Sin duda alguna. Un porcentaje importante de jóvenes no tienen valores ni la cultura del esfuerzo. Lo que más me preocupa es que los delitos, que habitualmente se cometían por un afán de lucro, ahora no tienen móvil o razón aparente. Cada vez incautamos más armas blancas a los jóvenes. ¿Cómo sale de su casa un chico menor edad con un cuchillo de cocina en el cinturón? ¿Qué intención lleva? Todas estas cosas nos hacen pensar que la cosa o se ataja de una manera radical o desde luego vamos a tener complicaciones importantes.
P. ¿Se refiere a la Ley del Menor?
R. Hay que tutelar a la juventud y tener cuidado con el camino que estamos sembrando porque en el día de mañana será la generación que dirigirá a generaciones futuras. No me corresponde criticar las leyes, que están para cumplirlas, pero no se puede legislar con la liberalidad con la que se ha legislado en algunas cosas porque luego se pagan las consecuencias. La Ley del Menor, desde que se publicó, ha recibido críticas importantísimas.
P. ¿Qué le parece la creación de los dos fiscales antidroga en Cádiz?
R. Es un logro muy importante. Lo que sería deseable es que estos fiscales tuvieran un gabinete o fiscales a sus órdenes para que no fuera una figura casi unipersonal, sino un órgano un poco más potente.
P. ¿Comparte el informe del Gobierno que culpa a la policía del retraso en el rescate de la patera de Rota cuando fallecieron 37 inmigrantes?
R. A la policía no le ha molestado porque no es cierto. No es competencia de la policía lo que se nos adjudicó en ese momento y, aún así, cumplimos. Si quien tenía que salir no podía, o a quien le dijeron que tenía que rescatar a estos señores se negó a salir porque tenía que ir acompañado de fuerzas de la policía... pues la policía en breve tiempo puso los efectivos suficientes. A la policía, de hecho, nadie le ha dicho que se explique.
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