Un matrimonio iraquí formó parte del grupo de suicidas en Ammán
Las fuerzas de seguridad jordanas detienen a 12 sospechosos
Un matrimonio iraquí y otros dos hombres del mismo origen son los supuestos suicidas que el miércoles asesinaron a 57 personas en tres hoteles de Ammán. Así lo asegura la organización Al Qaeda en Mesopotamia en un nuevo comunicado, en el que añade: "Se decidió utilizar cinturones para ser más precisos y causar el máximo daño posible". El Gobierno jordano detuvo a 12 "sospechosos" de implicación en la matanza.
"La mujer decidió acompañar a su esposo en el camino del martirio", asegura la nota, difundida en una de las páginas habitualmente empleada por la organización que dirige el jordano Abu Musab al Zarqaui, aunque su autenticidad no pudo verificarse con total certeza. En la misiva, Al Qaeda advierte también: "Los judíos deben tener la seguridad de que su muro de seguridad al oeste del río de Jordán se halla ahora a nuestro alcance y de que no se tardará mucho en que los golpes de nuestros combatientes les alcancen también".
El primer ministro jordano, Maruan Muasher, aseguró que son 12 los sospechosos capturados por las fuerzas de seguridad. Añadió que algunos de ellos son jordanos, pero rechazó revelar si alguno de ellos es iraquí. Con todo, la posibilidad de que alguno de los suicidas proviniera del país vecino adquiere consistencia ya que varios empleados del hotel Radisson y del Days Inn indicaron al diario Jordan Times que habían reconocido el acento iraquí de dos jóvenes. La frontera con Irak permanece sellada exclusivamente para quienes proceden de ese país, pero no en sentido contrario. Fue precisamente Leith Kuba, portavoz del Ejecutivo de Ibrahim al Yafari, el primero en advertir de la posibilidad de que terroristas de Irak hubieran cometido la masacre. Actualmente residen en Jordania más de 700.000 iraquíes, muchos de ellos huidos tras la invasión anglo-estadounidense, en marzo de 2003.
Las investigaciones se centran en las cámaras de los hoteles. Fuentes diplomáticas occidentales confían en la eficacia demostrada por la policía y los servicios espionaje jordanos, que han desbaratado numerosos atentados desde el año 2000. Aunque ya en agosto Al Qaeda logró atacar con cohetes artesanales dos navíos estadounidenses anclados en el puerto de Áqaba.
Después del rezo de los musulmanes en su día sagrado -en las mezquitas se condenaron sin tapujos los atentados y se descalificó a quienes se erigen en defensores del Islam a base de bombazos-, unos pocos miles de personas se manifestaron en torno a la mezquita Al Huseini, en el centro de la capital, portando banderas jordanas y deseando "larga vida al rey".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.