El Ayuntamiento de Cádiz elude el debate con los vecinos

El desencuentro entre algunas asociaciones de vecinos y el Ayuntamiento de Cádiz vivió ayer otro capítulo. La reunión que se antojaba clave para dirimir las diferencias entre el gobierno local, del PP, y el movimiento vecinal quedó reducida a la entrega de ordenadores a las 15 asociaciones que acudieron a la convocatoria municipal. Algunos dirigentes vecinales expresaron su malestar por el desarrollo de una reunión a la que fueron convocados con el convencimiento de que debatirían sobre los problemas más acuciantes de las asociaciones, como la lucha contra los asustaviejas que actúan en Cádiz.

La reunión fue convocada por la concejal de participación ciudadana, Ana Peral, quien la pasada semana protagonizó un crispado enfrentamiento público con el portavoz de la Federación 5 de abril, Luis Monroy, en un debate sobre asustaviejas. Antes de comenzar el encuentro de ayer, los dirigentes vecinales afirmaban que fueron citados para un encuentro "sorpresa", que finalmente resultó ser el anuncio de la entrega de 15 ordenadores para estos colectivos.

La noticia fue bien acogida por la mayoría de los representantes vecinales, aunque algunos se mostraron molestos por las formas empleadas por el Ayuntamiento para realizar este anuncio. Un representante vecinal de la asociación Beduinos abandonó la reunión después de acusar a Ana Peral de "haber montado un tinglado para repartir 15 ordenadores". De igual manera, el presidente de la federación 5 de abril, Antonio Gómez, recordó que siguen pendientes de discusión los principales problemas del movimiento vecinal y que este colectivo aún no ha recibido respuesta a su petición para reunirse con la alcaldesa.

Esta federación vecinal asistió finalmente a pesar de que algunos directivos se habían quejado inicialmente por no haber recibido invitación. La edil Ana Peral demostró que si habían sido invitados y aprovechó este hecho para criticar nuevamente a algunos dirigentes vecinales, aunque no concretó nombres. "Hay muchas formas de hacer el ridículo y ésta es una de ellas. El Ayuntamiento, mientras tanto, se dedica a trabajar", espetó.