Tony King afronta la última sesión del juicio por la muerte de Carabantes

La última sesión del juicio contra Tony King, acusado de matar a la joven de 17 años Sonia Carabantes en agosto de 2003, se celebrará hoy en la Audiencia Provincial de Málaga. Durante la mañana, está previsto que declaren dos peritos de la Policía Nacional que no pudieron hacerlo la semana pasada, que se termine de dar lectura a las pruebas documentales solicitadas, y que las partes presenten sus conclusiones definitivas. En su calificación provisional, la Fiscalía solicitó para el británico una pena de 34 años de prisión, por los delitos de asesinato, detención ilegal y agresión sexual. La acusación particular elevó la petición a 44 años.

A lo largo de las cuatro sesiones anteriores, celebradas los lunes y martes de las dos pasadas semanas, declararon más de veinte testigos y una quincena de peritos. El primer día, lo hizo el acusado, que sólo respondió a las preguntas de su abogado y trató de incriminar a Dolores Vázquez, que llegó a ser condenada por la muerte de Rocío Wanninkhof, de la que King también está acusado.

La trabajadora de un lavadero de coches reconoció al británico como el hombre que llevó a limpiar un coche con manchas de sangre. Varios peritos explicaron la coincidencia del perfil genético del acusado con restos hallados cerca del paraje donde apareció la víctima. Los forenses describieron la brutal paliza que sufrió la joven de Coín antes de morir, y calificaron a King como un "psicópata".

El juicio ha estado rodeado de un fuerte despliegue mediático, adelanto de lo que supondrá el proceso por el caso Wanninkhof, ante un jurado popular, previsto para principios de 2006.