Reclamaciones

El 2 de septiembre se reunieron representantes del Ministerio de Fomento, de la Comunidad Autónoma de Madrid y de ocho ayuntamientos con una petición sobre la mesa de estos últimos frente al primero. Le solicitaron al ministerio que el aeropuerto Madrid- Barajas se cerrara por la noche en el horario de 23.00 a 7.00. Lógicamente, la respuesta fue negativa por inviable.

Los ayuntamientos se quejan de los ruidos que las aeronaves generan en las operaciones de despegue y aterrizaje que a esas horas se hacen, que son las menos comparadas con las que se llevan a lo largo del todo el día.

El argumento del ministerio parece correcto en el sentido de que a esas horas hay ciertos vuelos que no pueden salir a otras horas distintas, y además, se recuerda que ya existe una directiva europea que prohíbe desde las 24.00 hasta las 6.00 aterrizar o despegar a ciertos tipos de aeronaves precisamente porque contaminan sonoramente por encima de los niveles legales.

Por otra parte, recordarle a la presidenta de la Comunidad que no es ético reclamar ahora cuando el Gobierno de la nación no coincide con sus propios colores. ¿Por qué no le reclamó lo mismo a Álvarez Cascos o a Arias Salgado? ¿Qué tiene en contra del aeropuerto de Madrid-Barajas? Y a la alcaldesa de Torrejón de Ardoz más le valdría solicitar otras cosas más importantes para su pueblo, máxime cuando existe una base aérea militar más cercana que el propio aeropuerto de Barajas y desde la que algunas noches ciertos aviones, mucho más ruidosos que los Airbus, como son los cazas reactores, hacen vuelos rasantes muy cerca de las azoteas de nuestras viviendas.

Para terminar, decir que si el aeropuerto ya está de por sí saturado, sólo le quedaba al pobre tener que comprimir aún más los horarios de los casi mil vuelos que diariamente operan en él.

Cuando algo se pone de moda...