Un niño de 11 años pierde un brazo al tirarse al metro tras una discusión con su madre

Un niño de 11 años sufrió ayer la semiamputación del brazo izquierdo al arrojarse al metro tras mantener una discusión con su madre. Los hechos ocurrieron en la estación de Islas Filipinas (línea 7), cuando el menor mantenía una discusión con su madre supuestamente tras haber sido suspendido en una asignatura en el colegio, según indicaron fuentes del caso.

Eran las 17.15 cuando el pequeño se encontraba con su madre en el andén 2 de la estación de Islas Filipinas. Según señalaron testigos presenciales a la policía, el niño mantenía una discusión con la mujer. En un determinado momento, el chiquillo vio que el metro estaba entrando en la estación y se arrojó a las vías tras decir: "Adiós, mamá".

El niño permaneció en cuclillas entre las vías fracciones de segundo, hasta que llegó el convoy y lo arrolló. El maquinista no tuvo tiempo de detener el tren, que produjo al chaval la semiamputación del brazo izquierdo. Fuentes sanitarias señalaron que el miembro no le podrá ser reimplantado ya que las ruedas no lo seccionaron limpiamente, sino que el menor sufrió un aplastamiento.

El niño quedó bajo el convoy hasta que fue rescatado, lo que motivó el corte temporal del servicio. La víctima perdió gran cantidad de sangre como consecuencia de la grave herida que sufría. Los facultativos del Samur estabilizaron al herido y lo trasladaron al servicio de urgencias del hospital Clínico, donde fue intervenido quirúrgicamente. En principio no se teme por su vida, salvo complicaciones posteriores.

Fuentes del caso señalaron que el pequeño acababa de salir del colegio y que mantuvo una fuerte discusión con su madre antes de decidir tirarse al metro. Nadie pudo evitar el accidente. La cartera que llevaba quedó totalmente ensangrentada.

Este suceso se produce tres semanas después de que una joven de Fuenlabrada, Miriam Alonso, de 20 años, fuera arrojada al tren por un enfermo mental, Jorge R. V., de 23, en la estación de metro de Carabanchel. La joven sufrió la amputación de la pierna izquierda a la altura de la pelvis.