Phil quiere ejercer de padre
Phil Collins, legendario batería y cantante del grupo Genesis que emprendió en 1981 una fecunda carrera en solitario, abandona después de 30 años las giras por el mundo porque, según dijo en Praga, "quiero ser un padre normal". "Mi hijo mayor, de cuatro años, empezará pronto el colegio, y ésta fue la fecha tope que me puse", señaló. Collins, de 54 años y casado en terceras nupcias, sufre una progresiva complicación de oído. El escenario de Praga será, el 23 y 24 de noviembre próximos, testigo del último gran concierto del músico, después de que el encuentro en la capital checa fuera aplazado durante un mes debido a un resfriado que había contraído en San Petersburgo. Collins, con un equipo de 75 personas, ha querido viajar a Europa oriental -donde "hemos actuado pocas veces"- para decir adiós "de buena manera", y tras su recuperación confirmó que la próxima escala será Budapest (Hungría). La cita de Praga "será realmente una retrospectiva que celebra el pasado" y el colofón de la gira por Europa Occidental y América.
"Cuando vi en Vilna (Lituania) una pancarta diciéndome 'Phil, te llevamos esperando 30 años', simplemente no podíamos abandonar aquello", dijo el artista quien actuó "a pesar de encontrarme muy mal", según explicó. El músico bromeó con que su retirada no supone una jubilación anticipada, sino que seguirá ofreciendo conciertos de pequeño formato, explorando otros tipos de música, e incluso no descartó volver a sus raíces, a relanzar la banda Genesis "a tres (con Tony Banks y Mike Rutherford) o a cinco (también con Peter Gabriel y Steve Hackett)". A diferencia de otras bandas que se rompieron por enemistad, "hay ahí todavía mucho cariño", apostilló.-
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