El líder no contará con los socialistas que hacen el juego a la derecha

Joan Ignasi Pla reconoció ayer en el Comité Nacional la dificultad de movilizar a esa mayoría social progresista necesaria para el cambio político. "Sé que hay cosas que mejorar en el partido, pero también que tenemos equipos e ideas y estamos haciendo una oposición que ha puesto de manifiesto el despilfarro y la confusión entre los intereses públicos y privados en el PP, y los apoyos más que dudosos con los que cuenta Camps", dijo Pla en alusión a políticos del entorno del presidente de la Generalitat como Carlos Fabra, Rafael Blasco, Luis Díaz Alperi o los alcaldes de Torrevieja y Orihuela.

Pla censuró a los que se desconciertan rápido por una encuesta aislada u otros elementos coyunturales. "Esto no es posible", aseveró, y pidió a todo el partido trabajo, cohesión y evitar errores. También advirtió de que no contará en 2007, si gana las elecciones, "con los que alimenten directa o indirectamente el discurso de la derecha" o "antepongan los intereses particulares a los colectivos". Un rumor se extendió por la sala, donde ayer se dieron notables ausencias, como las de los alicantinos Ángel Franco, Blas Bernal o Juan Pascual Azorín. Muchos entendieron que el aviso iba dirigido a los que dan cobertura al urbanismo del Consell, pero también a los que se están anticipando con las candidaturas.

En el turno de palabras, Vicent Garcés, portavoz Izquierda Socialista, pidió más convicción en los planteamientos del partido y que lo dicho ayer no se olvidara al día siguiente. José Marcet, secretario comarcal de La Montaña, reclamó más apoyo al municipalismo y la reforma de la ley electoral. Ricard Torres, portavoz de Economía del PSOE en el Congreso, pidió más impulso a la organización para trasladar las políticas del Gobierno de Zapatero a las agrupaciones y a los Ayuntamientos y Rafael Rubio aconsejó a Pla que no esperase a 2007 para desprenderse de los que hacen el juego a la derecha. Rubio, secretario del PSPV en Valencia, reclamó más coordinación con Madrid y pidió una reflexión sobre por qué el partido, aun con avances, no llega a esa mayoría social progresista.