El mundo está fatal de los nervios

Mario Díaz confiesa que no se veía trabajando en una herrería el resto de su vida. Su sueño era dedicarse a la música. Y, el próximo 12 de noviembre, un trozo de ese sueño se hará realidad.

Mario es el vocalista de Los Aslandticos, el primer grupo que lanza la nueva discográfica de Manuel Ruiz, Queco. El álbum, que se ha preparado durante un año y medio, se llama El mundo está fatal de nervios.

Las 12 canciones del disco también son un trozo de los sueños de Luisma Villegas, Juan M. Bueno, Julio Jiménez, Alberto Invernón, Jesús Gómez Casares y Jorge Carmona, el resto de componentes del grupo cordobés.

Cuentan que son chavales de barrio que se han tenido que ganar la vida como han podido, pero que en su cabeza siempre estaba la música como profesión. Se conocieron hace unos cinco años. Como tantos otros, se juntaban como un grupo de amigos para intentar hacer música. Su punto de encuentro estaba detrás de una antigua fábrica de cementos de Córdoba. Y la afición se convirtió en conciertos en pequeños locales, festivales... Hasta que se toparon con Queco.

Definen su estilo como "fullería", una forma de llamar a la fusión anárquica, sin guión previo. Suenan un poco a reggae, a flamenco, a rumba, a rap... Suenan a Los Aslandticos. Y Los Aslandticos suenan completos en sus conciertos.

"Nosotros salimos de los barrios... Por eso sabemos cómo está el mundo que nos rodea", explica el vocalista del grupo cordobés. Queco destaca de ellos, además de su calidad musical, el compromiso de sus letras. "Hablamos de inmigración, de amor, de droga... De los temas que están en la calle, que era donde nos reuníamos", afirma Díaz, cuando se refiere por ejemplo al single de promoción Se ven venir.

Carmona, el percusionista, resume lo que quieren de la música: "disfrutar y transmitir".