Gutiérrez insiste en que es necesaria una norma que haga de Andalucía "la región del golf de verdad"

Hacer de Andalucía "la región del golf de verdad" es el objetivo fundamental del decreto regulador de campos de golf que ultima la Junta, según la consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez. De esta forma, la consejera se refería a la proliferación de instalaciones de este tipo que han sido más bien la excusa para levantar promociones inmobiliarias en suelo no urbanizable y en las que la actividad en si del golf quedaba realmente relegada, con campos que dejan mucho que desear.

"El golf supone una gran oportunidad económica y turística, pero también presenta problemas ambientales y territoriales que es lo que el decreto tiene que equilibrar", explicó Gutiérrez, quien dijo que "lo primero que habrá que hacer es definir el golf". Así, explicó que ante todo se trata de una actividad deportiva, que ofrece interesantes expectativas como atractivo turístico, pero que requiere de unos parámetros determinados y de una serie de equipamientos y recursos naturales".

El decreto en el que trabajan las consejerías de Obras Públicas, de Medio Ambiente, y de Turismo y Deportes, restringirá las promociones inmobiliarias en los campos de golf, y sólo permitirá ciertos usos residenciales y hoteleros de baja densidad y distanciados de los campos cuando éstos se construyan en suelo no urbanizable.

El decreto establecerá también unas superficies mínimas para los campos, y parámetros para cada una de sus partes (green y calles), y obligará al uso de agua reciclada para el riego.

Además, la Junta se reservará la potestad de declarar de interés estratégico algunos campos de alta calidad tanto desde la perspectiva deportiva como turística, para los que hará las pertinentes reservas de suelo en los planes de ordenación territorial que deberán acatar los ayuntamientos afectados.

Gutiérrez confirmó también en Málaga que el Plan de Ordenación Territorial (POT) del área metropolitana de Málaga reservará para uso público como parque la zona de Arrainjanal donde el Ayuntamiento de Málaga había proyectado la construcción de una marina deportiva y un complejo residencial de 900 viviendas. Al respecto, el secretario general de Urbanismo, Vicente Granados, explicó que "España tiene que empezar a repensar su costa si quiere seguir siendo competitiva para todos los visitantes y tener espacios que los ciudadanos puedan disfrutar", y que Arrainjanal es la única zona libre que queda en el litoral de la capital malagueña. "No se trata de dejar espacios libres para no hacer nada, sino para dedicarlos al uso ciudadano".

El POT de Málaga también reservará el Campamento Benítez, y que atenderá "gustosamente" la petición que ha hecho el Ministerio de Fomento para ubicar el Museo del Transporte y un parque relacionado con éste. "Es una oportunidad de uso ciudadano", insistió la consejera.