Transparente por sentencia

La sección 15ª de la Audiencia Provincial de Barcelona ha dado la razón a Francesc Gordo y Robert Blanch, los dos socios del Barcelona que denunciaron a la directiva del club tras su decisión de no hacer públicos los resultados de la due dilligence sobre las cuentas de la época en que Joan Gaspart presidió la entidad. El Barcelona, que ganó el juicio en primera instancia, ha anunciado que recurrirá la sentencia, ante el Tribunal Supremo y publicada ayer en las páginas de Mundo Deportivo.

El fallo de los magistrados Ignacio Sancho Gargallo, Jordi Lluís Forgas i Folch y Luis Garrido Espá, emitido el pasado 22 de septiembre, considera que el derecho a la información es inherente "al hecho de ser socio de cualquier entidad" por encima de ser o no socio compromisario de la misma. Igualmente, los jueces instan en el escrito al presidente del Barça Joan Laporta a ser transparente "porque serlo impide, o cuando menos obstaculiza, los abusos por parte de los órganos directivos que redundan en perjuicio de los clubs y/o de sus socios".

Esa consideración la avala el redactado del artículo 22 de la Ley de Asociaciones Deportivas de la Generalitat esgrimido como norma que prima sobre el contenido de los estatutos del Barcelona, que sólo contemplan la posibilidad de ofrecer información a los socios compromisarios. "Los estatutos no pueden contradecir normas generales preceptivas", avisa el fallo. Sólo en el caso de que fuera perjudicial para la entidad, los jueces hubieran aceptado la decisión del Barça. "Pero no se han argumentado razones por las que resulte perjudicial para el club", continúa el fallo en alusión a los documentos que reclaman los socios Blanch y Gordo. Basándose en ello, los magistrados insisten al considerar que los socios "tienen también derecho a consultar el libro de actas porque difícilmente puede invocarse el perjuicio de la sociedad por el ejercicio de este derecho de consulta".

La due dilligence es un procedimiento habitual que se usa para valorar el estado de cuentas de una empresa en procedimientos de compraventa. Fue Lluis Bassat, candidato en las elecciones de 2003, quien anunció durante la campaña electoral su compromiso de investigar a fondo las cuentas del Barcelona durante los tres años en los que Joan Gaspart presidió el club mendiante este pormenorizado estudio.

Recurso de la directiva

La candidatura de Laporta hizo suya la idea y, tras ser elegido presidente, ordenó que se investigara a fondo la gestión de Gaspart. Sin embargo, meses después, al recibir los resultados del estudio, decidió no difundirlos. Varios ex candidatos le acusaron entonces de haber incumplido su promesa electoral de "levantar las alfombras". Laporta defendió en la última asamblea del club celebrada en agosto que la auditoría no contenía datos suficientes que justificaran llevar a Gaspart a los tribunales, más allá de una mala gestión. Y que por tanto no había ninguna garantía de éxito. En consecuencia, muchos socios como Gordo y Blanch se quedaron con el deseo de saber cómo y por qué se acrecentó la deuda del club bajo el mandato de Gaspart.

Tras recibir el fallo a su favor, Gordo y Blanch pasarán por las oficinas del club, acompañados de un notario, para reclamar que se haga efectivo el derecho que les ha sido otorgado por la decisión judicial. Un portavoz del club avanzó ayer que la directiva recurrirá la sentencia. El plazo expira el próximo jueves. Y concluyó: "La transparencia que se exige choca con la operatividad del club. Mañana, cualquiera se da de alta y nos pide el contrato de Ronaldinho".