La otitis de la discordia

Una simple otitis ha desencadenado una guerra en el Valencia con acusaciones de dopaje y violación de las normas internas del club de por medio. El central David Navarro sufrió a finales de la temporada pasada un fuerte dolor de oído y los servicios médicos del Valencia decidieron este verano probar un tratamiento agresivo mediante corticoides. Tan agresivo que Navarro recibió, sin saberlo, un producto que la FIFA recoge en su lista de medicamentos prohibidos por dopaje. El club entendió que la ausencia de competiciones oficiales durante el verano permitía administrar al futbolista el medicamento, ya que no iba a someterse a ningún control antidopaje. Navarro, sin embargo, no pudo disputar la Copa Intertoto por los efectos del producto y, según afirma, eso le perjudicó "muchísimo" al no poder competir y quedar fuera de las convocatorias de Quique -este curso sólo ha participado en dos partidos amistosos-.

"Los médicos tienen la culpa. Me dieron un medicamento que daba postivo y he estado un mes y medio sin jugar", dijo Navarro en alusión directa al jefe de los servicios médicos, Rafael Llombart. El defensa asegura que se enteró de las propiedades dopantes del producto al consultar sus características "en Internet" y que avisó de inmediato a los médicos, que rectificaron el tratamiento. "Me pidieron disculpas, pero a mí eso no me vale", afirma. Llombart, mientras, se ampara en el "secreto profesional" para eludir el tema. Pero parte de ese secretismo se desveló ayer. Según fuentes del club, Navarro sufrió la otitis al practicar la caza, una actividad a la que es aficionado pero que está prohibida por el club, al igual que otras como montar en moto o practicar deportes considerados peligrosos. Los continuos disparos pudieron dañarle el tímpano.

El Valencia se reunió ayer con el representante del futbolista, José María Orobitg, y estudia imponerle una sanción. El jugador se limitó a asegurar que tiene la "conciencia tranquila". "El problema no es la causa [de la enfermedad], sino cómo se intentó curar", dijo ayer Navarro, cuya carrera se ha visto truncada por la polémica otitis.