Tres cazadores declaran a la Guardia Civil que los autores del fuego de Sierra Nevada no estaban perdidos
Tres cazadores de la localidad granadina de Lanjarón, que la tarde del pasado 22 de septiembre se encontraban en las inmediaciones del lugar donde se originó el incendio de la ladera sur de Sierra Nevada, declararon ayer como testigos ante la Guardia Civil y dijeron que "no parece que la pareja que causó el fuego -por una supuesta negligencia- estuviera perdida" en el monte.
La pareja de extranjeros encendió una hoguera que, a la postre provocó el incendio y calcinó 2.610 hectáreas. Ambos declararon en el juzgado de la localidad de Órgiva que habían encendido el fuego para pedir auxilio porque estaban perdidos. La jueza los dejó en libertad sin cargos, con la obligación de presentarse regularmente en el juzgado.
Uno de los cazadores, José Ruiz, aseguró ayer a este diario: "Los vimos cómo a las siete de la tarde y se encontraban tumbados tomando el sol y contemplando el paisaje". "No parecían encontrarse perdidos". De hecho, minutos más tarde, uno de los testigos vio como recogían le leña y como le prendían fuego a las ocho y cuarto.
"Mi compañero les dio voces desde unos 200 metros de distancia diciéndoles que si pretendían pegarle fuego al monte". Ruiz añadió que su compañero llamó enseguida a su cuñado, que es agente forestal, para denunciar el hecho.
Cuando el fuego ya había comenzado, los tres cazadores orientaron a la Guardia Civil para encontrar a la pareja. "De hecho los encontraron en uno de los caminos por donde podrían salir de aquel lugar, por lo que difícilmente podrían estar perdidos", explicó ayer José, que añadió: "No parecía que desconocieran el terreno".
Este testimonio, de ser considerado por la juez instuctora, podría modificar el grado de responsabilidad de la pareja, a la que el juzgado solo obligó a depositar 18.000 euros cada uno para afrontar futuras responsabilidades. La Guardia Civil de Lanjarón ha llamado a declarar a los cazadores tras conocer la jueza por la prensa que habían estado en el lugar de los hechos. La Benemérita enviará ahora su declaración al juzgado para incluirlas en las diligencias.
La pareja de extranjeros, que vive en un pueblo cercano del Valle de Lecrín, llamó al Servicio de Emergencia del 112 para alertar de que estaban perdidos y que habían encendido una hoguera para que pudieran ser localizados. En la grabación que conserva este servicio se oye incluso, a uno de los interlocutores advertir que el fuego se estaba propagando.
José Ruiz, en las declaraciones previas a su comparecencia ante la Guardia Civil, mostró sus dudas de que los excursionistas estuvieran perdidos, porque de hecho, luego bajaron huyendo de la zona por uno de los caminos que existen. Además, cerca del lugar donde comenzó el incendio, en el paraje de Tajo Negro (no en el Cortijo de Tello, como se dijo en un principio), hay cortijos, "algunos de los cuales estaban habitados aquella tarde, incluido un pastor que estaba allí".
Aunque los retenes de la cercana base de Los Tablones se pusieron en marcha de inmediato, el incendio se propagó rápidamente hacia el oeste y durante la noche calcinó el 80% de la superficie total afectada.
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