La prima de la niña asesinada en Almería optó por el silencio en el juicio

La prima de Montserrat Fajardo Cortés, la niña asesinada el 17 de marzo de 2002 en una casa del barrio almeriense de Piedras Redondas, Carmen María S. S., de 13 años, no quiso hablar durante su exploración en el juicio por el asesinato de su prima. Carmen María no contestó a ninguna de las preguntas formuladas por el Ministerio Fiscal, la acusación particular y la defensa de los tres acusados, entre ellos su madre Juana Santiago.

Durante la sesión de ayer también testificaron la tía de la niña y su marido, que relataron cómo Juana tiró dos bolsas de basura en la clínica adonde llevó a su hija Carmen Mari el 18 de marzo.

Carmen María S. S. no ratificó ninguna de las dos declaraciones que llegó a hacer en el juzgado de Instrucción número 2 de Almería. Tampoco se pronunció sobre una diligencia policial de abril de 2002 en la que consta que manifestó que fue su padre el que apuñaló a Montse mientras su madre "no pudo hacer nada".

La exploración de la niña tuvo lugar casi tres horas después de lo previsto, hacia las 13.35, y después de que la Guardia Civil llevara a la menor a la Audiencia por orden de la presidenta de la sala, Soledad Jiménez de Cisneros Cid, ya que ésta no compareció por voluntad propia. A preguntas de la presidenta -"¿No quieres hablar conmigo?, ¿estás nerviosa?, ¿quieres hablar con alguna persona que me diga a mi si estás en condiciones de hablar?"- la niña no hizo manifestación alguna.

Carmen María tampoco musitó palabra a las preguntas realizadas por el fiscal sobre si era verdad lo que dijo en una declaración ante el juez instructor el 11 de diciembre de 2002. En ella, Carmen María relató que ella, su madre y su padre, bajaron a Montserrat a la habitación, le quitaron la ropa y ella misma le puso un fixo en la boca, sus padres la sentaron en un barreño y su madre le echó un líquido en la cara mientras su prima se retorcía y gritaba "como una rata". La niña tampoco explicó al abogado defensor de Engracia Santiago La Mariqueña y Antonio Fernández El Follares si era verdad lo que dijo en su día al reconocer que "sólo vio a Engracia cuando fue a llevarle el spray a su madre y no antes".

También testificaron la hermana del padre de Carmen María, Antonio Santiago Torres, que apareció ahorcado a las pocas horas de conocerse el asesinato. Su hermana Dolores Santiago Torres relató que al día siguiente de la muerte de la niña, cuando se desplazaron hasta el tanatorio ella y su marido, vieron llegar a Juana Santiago con su hija Carmen Mari y ésta última estuvo vomitando. Fue entonces cuando Dolores le propuso a Juana llevar a la niña al médico y ésta aceptó. Al salir de su casa, adonde fueron a por los cheques médicos del seguro privado, Juana sacó varias bolsas de basura que tiró en la Clínica, al otro lado de la ciudad. "Me dijo: ¿te importa que echemos basura al coche y la tiremos por el camino? Me han dicho que no tiremos basura de cuatro casas para arriba. Yo no pensé en nada. Y por el camino no paraba de decir ¡Ay que ver la niña!", explicó Dolores. La hermana de Antonio Santiago tamibén relató el empeño de Juana aquella tarde para que ella y su marido se llevaran unas sillas de cocina. El juicio por el asesinato de Montserrat Fajardo se reanudará el próximo lunes.