La confederación precinta el pozo que usaba el RACE para regar su campo de golf

La Confederación Hidrográfica del Tajo precintó ayer por la mañana el pozo, supuestamente ilegal, que utilizaba el Real Automóvil Club de España (RACE) para regar su campo de golf. Los técnicos, acompañados por agentes del Seprona, precintaron la perforación, de la que se calcula que se obtenían unos 100.000 metros cúbicos de agua al año. Directivos del RACE argumentan que el pozo tenía permisos provisionales, pero la confederación lo desmiente. A estas medidas provisionales le puede seguir un expediente sancionador con una multa de 1.500 euros por hectárea regada.

A las diez de la mañana de ayer, representantes de la Confederación Hidrográfica del Tajo y agentes del Seprona se presentaron en las instalaciones del RACE con una orden para cerrar el pozo que riega las praderas de este club deportivo. A las puertas aguardaban directivos de las instalaciones, que inicialmente trataron de impedir el paso a los encargados de ejecutar la orden de precinto, dictada por José María Macías, presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo. Finalmente, abrieron las puertas a los técnicos.

Según fuentes de la confederación, "el pozo ilegal" que se encontraron tiene más de 200 metros de profundidad, y para sacar agua de él, el RACE utilizaba un potente motor de 150 caballos. En el momento de cerrarlo, el pozo tenía actividad. "Es muy difícil saber los litros por minuto que salían, pero el chorro era muy abundante", señala un portavoz de la confederación. "Calculamos que de esta perforación se podrían obtener 100.000 metros cúbicos de agua al año".

El RACE es una instalación deportiva que está situada en el kilómetro 28 de la carretera A-1, en el término municipal de San Sebastián de los Reyes. Entre sus instalaciones destaca un campo de golf de 18 hoyos diseñado por Javier Arana.

Recurso

El pasado lunes, el RACE recibió la notificación de que el pozo del que sacaban agua iba a ser precintado. Ayer sus directivos informaron de que 24 horas después, es decir, el pasado martes, interpusieron un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, a la vez que solicitaban la suspensión cautelar de las medidas objeto de impugnación. Tras realizar estos movimientos legales, el RACE comunicó a la Confederación Hidrográfica del Tajo la interposición del recurso y solicitó la paralización del precintado.

Ayer, el RACE, tras la visita de los técnicos de la confederación y de la Guardia Civil, emitió un comunicado donde se leía: "La inaceptable actuación de la Administración no sólo ha sido llevada a cabo de forma precipitada, sin esperar a la resolución del órgano judicial sobre la suspensión solicitada, sino que además carece de justificación de ningún tipo, ya que el pozo en cuestión fue autorizado provisionalmente por la propia Confederación Hidrográfica en abril de 2002, sin que esa autorización haya sido revocada en ningún momento".

Y añaden: "Existe en tramitación un expediente para la legalización del pozo, y la demora en la definitiva autorización no resultaría en ningún caso imputable al RACE, sino a la inactividad exhibida por parte de la Dirección General de Calidad y Evaluación Medioambiental, organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, al igual que la Confederación Hidrográfica actuante".

El RACE asegura en su contestación a las actuaciones de la Confederación Hidrográfica del Tajo que "resulta cuando menos sorprendente que, existiendo más de 19.000 pozos en situación irregular en la Comunidad de Madrid, tal y como ha puesto de manifiesto públicamente la Confederación Hidrográfica, se haya decidido a clausurar el utilizado por el RACE, cuando éste cuenta desde hace más de tres años -29 de abril de 2002- con la autorización temporal concedida por el mismo órgano administrativo actuante".

Un portavoz de la Confederación Hidrográfica desmiente estas afirmaciones: "El pozo no tiene título administrativo [concesión] para aprovechamiento de las aguas. Está en tramitación, luego su uso es ilegal y por eso se le ha abierto un expediente sancionador". Y añade: "Aun así, conociendo que no tiene concesión, el RACE ha seguido utilizando el pozo. Dadas las especiales circunstancias de sequía en las que nos encontramos, en el contexto del conjunto de medidas adoptadas por la confederación para paliar la situación, se decidió proceder al precinto cautelar de dicho pozo".

De los 29 campos de golf que hay en la región, 14 tienen abiertos expedientes sancionadores. Esta semana se actuará también contra los dos pozos que funcionan en los campos de golf del Club del Olivar de la Hinojosa (Madrid) y los otros dos de Villanueva de la Cañada.

Éstos son sólo cinco de los cerca de 19.000 pozos que la confederación tiene detectados y catalogados como irregulares -a falta de mayores pesquisas- en la región. Cada año se extraen de ellos, sin declarar y por tanto sin pagar, cerca de 70 hectómetros cúbicos de agua, un 12% del total que se consume en la región por temporada (600 hectómetros cúbicos).

Estas medidas de clausura forman parte de la nueva política de dureza impuesta por la confederación, que coincide con una importante época de sequía. Los embalses de la región están, según las últimas cifras, al 36% de su capacidad.